El año que nos cambió.

486 25 66
                                    

Janis

Estaba durmiendo.

Hasta que mi querido hermano me despertó.

—¡arriba dormilona! Es hora de decir buenos días —me quitó las cobijas de un tirón y abrió las cortinas dejandome ciega.

—cinco minutos más —pedí metiendo la cabeza bajo la almohada.

—nada de minutos mas, ya han dado las dos de la tarde y tu aquí dormida, das pena —dejo caer su mano contra mi pierna.

—¡hijo de mi madre! —lo pateé.

—auch, ya despierta, mira que no es un día tan malo.

—ya desperté, baboso.

—cretina.

—¡Sigurd Brandon Gibson! Mas te vale calmarte o te arranco las bolas ahora si —tire de su cabello

—ya controlate, hoy vamos a recibir invitados especiales —me mordió un brazo.

—auch, ¿quienes son tan especiales individuos? —sobe mi brazo.

—¿quien crees tu? —me pico con su dedo índice justo entre las cejas.

—Jim Morrison —me encogí de hombros.

—no.

—dame una pista.

—empieza con LED y termina con ZEPPELIN.

—¿es en cerio? —no iba a ocultar la emoción. Había pasado un año.

—si. Y llegan en media hora, si las cosas no salen mal.

—ja. Ja. Que gracioso. Sal de aquí, debo verme decente.

—¿ahora sí no?—lanzó una carcajada.

—fuera —le pellizque el brazo.

—tranquila, chica cósmica.

—no vuelvas a mencionarlo en alto —amenacé

—está bien, adiós pequeña psicópata.

Me dejo ahí toda hecha un desastre.

Si bien estaba con resaca, parecía ser que esta se había ido cuando esa noticia llegó.

Los efectos del LSD seguían en mi cuerpo haciéndome ver colores o que las cosas se movían.

Me di un refrescante baño, y al salir, me puse un vestido de tela delgada, con flores pequeñas y rosadas teniendo como fondo un color amarillo.

Seguido de sandalias, se sentí lista luego de haberme peinado un poco.

En cuanto baje a la oficina de mi padre el teléfono sonó.

hola, ¿quien habla?

Peter Grant, los chicos ya van para el hotel, yo aun me encuentro en el aeropuerto, considero que llegare un poco tarde a lo previsto Brandon entró

no se preocupe, estaremos atentos a su llegada, Mr. Grant.

una disculpa, ¿quien esta al teléfono?

Janis Gibson, la hija de Mr, Gibson, el dueño no se encuentra, pero mi hermano y yo estamos aquí en su lugar para servirle en lo necesario Bran me miro bastante sorprendido.

bueno, espero no de repita lo de la ultima vez, no quiero tener ningún problema, debo irme, adiós.

hasta pronto.

Una carta para Jimmy PageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora