20. Cartas y poemas

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-Esto es alarmante Jane, muy alarmante -vi como el ceño del rey se fruncia.

-Quiza yo puedo ayudar, soy italiana y los franceses no nos odian tanto.

-Si pero ahora estas casada con un inglés, seras una reina inglesa así que para los franceses eres una inglesa mas. Creo que deberé declararle la guerra.

-Eso es ilógico majestad.

-Es la unica salida, ¿acaso comprendes la magnitud de los problemas que tendremos si los franceses siguen obstinados en prohibirnos entrar en sus tierras? Eso generaría grandes perdidas para nosotros y para las colonias. Las colonias americanas no podrían con todo y perderíamos contacto con el resto de Europa.

Suspire y fui a buscar un mapa. A veces me arrepentía de ayudar al rey. Era un bonito día para estar encerrada en una habitación discutiendo sobre política. Lleve el mapa y lo extendí.

-Para evitar las perdidas y la incomunicación con las colonias, la flota inglesa puede desviarse mas al oeste para entrar al continente en España, cruzarla para llegar al Mediterráneo y luego seguir normalmente. Va a ser más largo y habrá un poco menos de ganancia pero de esa forma evitamos perdidas, también ganamos tiempo para negociar con los franceses.

-¡Sobre mi cadáver! No negociare con esos perfumados escandalosos -dijo enojado. Vimos la puerta abrirse y Thomas entro con de buen humor.

-La tercera es la vencida.

-Eso espero señor. Los primeros 2 poemas dejaron mucho que desear.

-No soy un poeta, ya os lo dije mi querida señora.

-Thomas... Es bueno verte -dijo seriamente el rey.

-¿Interrumpo algo? -dijo el preocupado.

-Llegas en buen momento. Estamos por entrar en guerra.

-¿Por qué?

-Los franceses acaban de bloquarnos el acceso al continente.

-Malditos, hay que declararles la guerra y que nos dejen pasar.

-¿Tu también? -lo mire- ¿Por qué no usan la ruta alternativa por España?

-Amor, eso es lo que los franceses quieren.

-Además la hija del rey esta casada con un principe español por lo tanto no podemos ir ni por España, ni por Francia.

-Entonces hagan esto -tome la pluma y trace una ruta- Ingleterra, Holanda, Alemania, Suiza, Italia. Es mas largo pero evitan Francia y llegan al Mediterraneo.

-No tenemos tratos con Suiza -dijo el rey.

-Entonces rodeen todo el continente.

-Eso sería un gasto innecesario en dinero y tiempo, les declararemos la guerra.

-Una guerra supone más gastos y muchas perdidas humanas.

-Jane -Thomas tomo mis hombros y beso mi mejilla- hay temas que solo los hombres debemos tratar porque las damas no entienden.

-Lo que si entiendo es que los hombres son sumamente orgullosos y destructivos. Prefieren la muerte antes que discutir pacíficamente y llegar a un acuerdo.

-No trates de cambiar el mundo, ten -me dio un sobre- ve y leelo mientras mi padre piensa que hacer.

-Thomas tiene razón, aprecio tu compañía pero en este momento prefiero a mi hijo aquí.

-Hombres... -tome el sobre de mala gana y fui a mi habitación.

¿Por qué tienen que ser tan tercos y estar obsesionados con la guerra?

Till Death Do Us PartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora