Till Death Do Us Part

28. El que avisa no traiciona

En un momento feliz
Amar es compartir
Es dar y recibir
Egoísta!

(....)

Egoísta no soy
Ayer, mañana ni hoy
Realisticamente si vivo
Ya tú sabes si te metes conmigo
Guerra avisada
No mata soldado 🎶🎶
(Belinda y Pitbull)
******

Llegue al palacio de Versalles escoltada por los mosqueteros del rey. Vi a Athos vagamente mientras entraba pero el me ignoro. Me quede asombrada al ver que el jardín era clasista, ordenado y racionalizado. Lo vi vagamente mientras el carruaje se iba moviendo. Mi palacio tenía un buen jardín pero este era mucho mejor. Abrí los ojos asombrada al ver la fuente que había frente a la puerta. El carruaje se detuvo y un criado abrio mi puerta.

-Bienvenue en France, dame (bienvenida a Francia, señora) -dijo mientras me ayudaba a bajar.

-Merci (gracias) -sonreí.

Comencé a caminar mientras miraba con admiración la cantidad de detalles de las paredes. Los tonos amarillo suave combinados con los ladrillos realmente era hermoso. Debía reconocer que era el palacio mas hermoso que vi en mi vida. Entre y me quite la capucha de mi capa mirando con ojos como platos el interior del palacio. Oro, cristales, oro y más oro. Los pisos eran de madera y estaban perfectamente lustrados. Sonreí como niña al escuchar el ruido que producían mis zapatos de tacón mientras caminaba. Las ventanas eran amplias, dejando entrar una gran cantidad de luz. Había hileras paralelas de esculturas de oro puro y lamparas de cristal. Era casi doloroso ver los cristales gracias al impacto del sol. De pronto sentí alguien que me tapaba los ojos.

-Adivinad quien soy señora -reí y me calme al saber que era Thomas. Me di vuelta y lo bese -Te extrañe mucho.

-Y yo mas -sonreí y acaricie su rostro- Es insoportable estar sin ti, no tienes idea de la falta que me haces.

-Y tu a mi, mi reina hermosa -volvio a besarme y me asuste al escuchar unos pasos. Nos separamos y vimos a un par de criados cargar nuestras maletas.

-¿Hace cuanto llegaste?

-Recién. Vi un carruaje con una bandera italiana y supe que eras tu. Hice que Jay se apurara para poder llegar justo detrás de ti -sonreí y el tomo mi mano- vamos.

-¿A dónde? -reí y empezamos a correr hasta llegar a una habitación casi a oscuras.

-Aún hay tiempo para la reunión y te necesito tanto...

-También te necesito pero puede entrar cualquiera.

-¿Cruzaste Francia vestida de hombre y tienes miedo de hacerlo en una habitación a plena luz del día?

-Mm... -mire a mi alrededor- no hay una cama.

-Hay un sillón y esta el piso. La alfombra parece suave.

-Oh... De acuerdo tu ganas, realmente te deseo -lo bese desesperadamente mientras el me quitaba el vestido rápidamente.

-Muy bien -comenzo el rey de Francia- estamos aquí porque los ingleses nos han faltado el respeto desde tiempos inmemoriables.

-No es culpa de mi hermano que tus princesas sean unas cualquieras -aprete la mano de Thomas por debajo de la mesa para calmarlo.

-El honor de mi hija fue gravemente comprometido por vuestro hermano, lo mínimo es que se casen.

-Mi hermano prefiere cortarse una pierna antes que casarse con una francesa insoportable. Además es ridículo que solo por eso nos bloqueen el acceso al continente.