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¿Alguien es capaz de ver lo derrotado que se siente el pobre niño en este momento?

La única mujer que estuvo presente y atenta a él en todo momento acaba de irse dejando a sus pequeños en un mundo sin el amor de ella.

El azabache ya no tenía luz, no había felicidad en él. El brillo de sus ojos desapareció y una mirada sin vida ocupó ese lugar. El brillo de su cabello fue reemplazado por un color opaco. Su sonrisa ya no se asomaba, ¿Cómo se sonreía? Su piel blanca con mejillas tiernas y rosadas se pusieron más pálidas y unas horribles ojeras hicieron su aparición bajo sus ojos.

¿Cómo haría? recién cumplió años, definitivamente los peores de su vida, tiene un hermanito de seis, y un padre alcohólico desde la partida de su madre.

Un abusador y asqueroso hombre.

Ese idiota culpaba al mayor de sus hijos por la muerte de su esposa, llegando a tal punto de golpearlo hasta dejarlo tirado y llorando, pidiendo piedad.

Jungkook se siente culpable, su padre le hizo creer que todo lo que salía de su boca eran estupideces. Tanto como él en sí.

La base de maquillaje que tenía su madre fue gastada por el azabache ocultando aquellas marcas que dejaba su padre con cada golpe.
Marcas notorias de color moradas, algunas estaban con tonos verdosos, azules, rojas. Simulando un cielo y la blanca piel eran las estrellas. Formando una galaxia.

Los días pasaban lentos ante los ojos de ambos hermanos, eran eternos. Las horas, minutos. Era el infierno mismo sin el amor de su madre.

Ya habían pasado dos meses. Dos meses cargados de dolor tanto física como mentalmente.

El azabache regresaba del colegio caminando solo por las oscuras calles. El silencio que lo rodeaba lo hundía cada vez más en su depresión.

Su hermanito estaba con fiebre y ya quería llegar a su hogar, si es que se le podría llamar así, para cerciorarse de que a su bonito no le haya pasado nada.

Apuraba su paso porque no le agradó para nada la idea de dejarlo solo con el estúpido hombre, que lamentablemente era su padre.

Un temblor recorrió desde la punta de sus pies, pasando por sus columna hasta acabar en su nuca. Lo que temía; ese hombre regresó, y no solo eso sino que una botella en su mano acompañaba su errático caminar. Estaba ebrio.

Corrió intentando llegar antes que ese hombre y encerrarse en su habitación junto a su hermano peor lamentablemente su padre lo tomo del brazo cuando estaba abriendo la puerta de entrada.

— ¿Adónde crees... Qué vas?— Jungkook arrugó la nariz y cerró los ojos al sentir el asqueroso aliento golpear contra su cara mientras el hombre hablaba arrastrando las palabras.

No contestó nada lo que provocó irá por parte del mayor.

no contestas... Bien, mejor voy con tu hermanito a ver cómo llora cuando mi mano toca su mejillita.

— ¡Ni se te ocurra!

— ¿Me levantas la voz? Respetame.

— ¡Una persona asquerosa como tú no merece respeto de nadie!

— mocoso... Ahora verás.


Contenido fuerte está en su decisión leerlo o no, sinó pueden pasar el capítulo <3


En lo que menos se lo esperaba aquel asqueroso hombre tomó del cuello al pequeño, lo arrastró y tiró sobre el sillón viejo acostándose sobre el tembloroso cuerpito.

Depression &gt;Jikook&lt;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora