Capítulo 18

1.3K 79 60
                                    

—¿Quieres callarte Calavera?— Demon pone los ojos en blanco.

—¡Tiene agallas!— dice entusiasmado asintiendo con la cabeza varías veces.

—Tu a cualquier chica que se mueva ya la quieres involucrar en esto?— le recuerda Escorpión.

No se que este pasando aquí pero el no debió verme, oh carajo ahora estoy en graves problemas. Querrá hablar sobre mi a su jefe y es ahí donde irán por mi.

Ahora solo quiero irme a mi apartamento, si sigo aquí no conseguiré nada de información, será mejor que me largue de aquí, huele a drogadictos y putos de mierda.

—¡Hey perra! Será mejor que te largues— otra puta aparece en las escaleras, es la puta que estaba arriba de Demon.

Ella no utiliza peluca, su cabello es rubio y su cara es exquisita. Tiene grandes pechos y un gran trasero, algo que no tengo yo. Ya se porque se la coje Demon.

—¡Oh vamos!— alzo las manos al cielo y las dejo caer en mis caderas como una reacción y digo molesta:—Será mejor que tu regrese a lamer pitos porque, qué nada más sirves para eso.

—Ohhhhhh— reacciona Calavera y después ríe aplaudiendo como foca. Saca un billete de cine dólares y dice— Apuesto por la chica linda decente.

Lo que siento ahora mismo es coraje y viene a él y apuesta. Esto empeora las cosas. Digo, nadie puede tratarme como su mierda, esa hija de puta hará que pierda la paciencia y solo mis manos querrán golpearla hasta morir.

—Nadie va apostar— gruñe Demon.

—Oh vamos Demon, ¿la chica no aguanta un rasguño?— baja de las escaleras lentamente.

Una de las razones por que la sangre me hierve es que está puta estaba arriba de Demon. No puedo evitar recordar como la movía sosteniendo sus caderas. Quiero llorar pero no quiero que esta perra vea que soy débil y así utilizarlo como un chiste y morirse de la risa.

—¡Vamos Natalie! Regresa arriba— grita Demon.

—¡Vaya! Hasta nombre de puta barata tienes— rio sarcásticamente.

—Ohhh te acabas de ganar uno de estos— se acerca hasta mi levantando su puño pero Demon la detiene inmediatamente. Yo me acerco a su cara levantando la mirada para demostrar que no le tengo miedo.

—Tu y yo tenemos que hablar— suelta a Natalie para después tomarme de los hombros y mirarme a los ojos.

—No tenemos nada de que hablar— aprieto la mandíbula y me safo bruscamente de su agarre.

Antes de largarme miro a todos con desprecio y les doy la espalda. Me dirijo al portón, no soporto estar ni un minuto más aquí, huele a puta barata.

Trato de avanzar más rápido, no quiero que le jefe me encuentre y sepa de mi. Ya suficiente tengo con las nuevas personas que me acaban de conocer, una me odia y otro me adora por mi coraje.

Aún no puedo creer que Demon se la estaba follando ¡oh vamos! Eres tan estupida April, Demon es un mujeriego de mierda es obvio que no va a dejar las mujeres que tiene a su alrededor por una chica común y corriente.

Lo peor del caso es que hoy íbamos a salir, hasta me había comprado un vestido muy caro para mi. No lo entiende, ¿a qué está jugando? Digo, no le encuentro sentido a este jueguito. Para mi solo es perdida de tiempo.

Por fin estoy fuera de la bodega, ahora solo estoy caminando las calles para despejar mi mente y pensar las cosas con claridad. No se que haré para deshacerme de Demon, siento cosas por el pero aún no es tan fuerte y eso es algo que agradezco mucho.

Demon| Bill SkarsgårdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora