El día de ayer fue muy acelerado para Marck, montar una moto conducida por un chico sin licencia y el casi suicidio de su amigo de tan solo 15 años, eso era algo que no pasaba todos los día.
Llegó al colegio apurado, había olvidado poner la alarma, pero al final, pudo llegar a tiempo y con 15 minutos de antemano. Sus amigas lo esperaban delante del casillero de Laura.
—Mierda Marck, creímos que no llegarías, tu siempre llegas temprano, la última vez que llegaste tarde fue hace dos años y fue por que huías de un perro vestido de payaso que sabrás Mohamed de donde salió.
—Ya van a empezar con sus boludeces, no me pasó nada.
Samantha se le quedó viendo fijamente a su amigo.
—No mientas Marck, tu padre te golpeó de nuevo ¿Verdad?, caminas extraño mientras haces muecas de dolor y tienes marcas en tu cuerpo, ya no debes esconderlo de nosotras.
Marck se extrañó y abrió el casillero de Laura de donde colgaba un espejo, este se detalló, y efectivamente, tenía unas muy notables marcas pero no fueron hechas por su padre, sus mejillas tomaron un color carmín al recordar de donde provenían.
—Espera un momento—dijo Laura —Estas son marcas y no golpes, no estamos cerca de último de mes, no recordabas esas marcas y ahora pareces el culo de un mandril de lo rojo que estas, eso solo puede significar una cosa.
—Espera, no me digas que...—Laura asintió y se dieron una sonrisa cómplice.
—Oh mierda—musitó Marck.
—¡Felicidades por perder tu- —el pálido cubrió las bocas de sus amigas antes de que terminaran la vergonzosa frase.
—Samantha, voy a tomar prestado tu maquillaje.
—Claro, está en mi casillero.
Marck empezó a caminar hacia el casillero, pero a mitad del pasillo escuchó que alguien llamó su nombre, Marck pasó unos segundos buscando quién fue entre la multitud.
Pero no vio a nadie y antes de que siguiera caminando, sintió como un balde de pintura rosa cayó sobre su cabeza, unos chicos pasaron por su lado, uno le tiró flores y el otro le tiró brillantina.
—Espero disfrutes de nuestro primer regalo para ti ¡Maricón!—gritó uno de estos.
Los demás estudiantes se amontonaron para ver que sucedía. muchos lo miraban con lástima, el grupo de amigos de Alan y Ethan reían y lo miraban con burla, todo el grupo, excepto un quinceañero y un extranjero, quienes veían la escena con asombro y confusión al no saber nada de eso.
Marck se sintió terriblemente humillado y se fue a las duchas rápidamente antes de pasar más vergüenza.
(. . .)
Marck perdió la primera hora de clases, cuando llegó al salón agradeció que nadie lo notara, a excepción de Noah, Laura y Sam, Marck solo se sentó en su puesto.
—¿Estás bien?—le preguntó Noah.
—Tranquilo, estoy bien; pedí permiso y siempre traigo ropa extra en mi casillero.
—Yo... lo siento mucho—dijo Noah mientras bajaba la cabeza apenado.
Marck sabía por que Noah se disculpaba, tal vez el fuera un chico muy fuerte y confiado, pero también seguía siendo inseguro en el fondo, tenía miedo, miedo de ser humillado y rechazado, como se lo estaban haciendo ahora a él.
Marck acarició levemente la cabeza de Noah, y luego lo despeinó ruda y ordinariamente.
—No te disculpes, no tienes culpa de nada; pero aún así, no quiero que me defiendas las próximas veces.
—¿Próximas veces?
—Por supuesto, esto es solo el comienzo.
Fecha de publi: 16/06/18
Fecha de edición: -
Dos caps en un día para compensar todo el mes en que no actualicé :)
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Él es Hermosa
Teen FictionMark Cowell es un chico talentoso, estudioso y que amaba el boxeo, bueno, asi lo veían todos. Pero lo que nadie sabía, es que Mark, un chico con un fuerte temperamento, tenía una vida problemática y dolorosa, y el hecho de que pasaba algunos de sus...