Todo el fin de semana estuve planeando con Iris cosas de campaña. Ella será mi mano derecha, como siempre. Pancarta, folletos, incluso galletas, están dentro de nuestro plan de campaña. Esperemos que todo esté listo para el martes e iniciar; también planificamos tareas para los demás chicos. Tenemos gran ventaja de que somos populares ya que los demás quieren agradarnos así que dudo que sea difícil. Lo que me preocupa es la víbora de Adam, lo conozco, sé que hará lo que sea para ganar. Suerte con eso animal. Ahora mi trabajo de Historia. Es domingo en la noche y no llevo ni la mitad. Me duermo a las 2:00 am, pero terminé.
Llega el lunes y todo va perfectamente bien. Mi estrés se ha ido, todo esta arreglado, solo hace falta actuar y mañana será él día. Ahora tengo que ir a clase y esperar que no pierda la cordura.
Termina la ultima clase. Al salir del salón hay alguien esperándome afuera, parece que el profesor Peltz quiere verme en su oficina, interesante. Me dirijo a su oficina y al llegar veo salir a Adam. Me mira de una forma burlona, lo sabía, trata de sabotearme. Entro y el profesor Peltz me recibe con hojas de mi desempeño académico en que lo que lleva en año. Me pide que tome asiento.
—Señorita Linderman, tome asiento por favor— me indica que me siente en la silla frente a su escritorio con su mano —. Hay un tema importante a tratar con usted sobre su candidatura para presidente del consejo estudiantil— se acomoda en su silla y golpea la base de las hojas sobre la mesa mientras aclara su garganta —. Al ser una candidata a presidente del consejo estudiantil tiene como obligación tener una imagen limpia en su desempeño academico. La cité aquí para discutir este tema, si bien no es serio, creo que es importante de remarcar. Tengo aquí un récord de su desempeño académico en lo que va del ciclo, de escasas 3 semanas. Basándome en su récord previo, me parece alarmante que apenas aprobará el ordinario de la clase de Física, ademas de que sus profesores han detectado un gran bajón en su desempeño. Entiendo que quiera ganar esta competencia pero jamas pondré un puesto de representación estudiantil sobre su educación. Si esto la esta distrayendo creo que debería considerar renunciar a la candidatura y poner su energía en las clases—. Mantiene su mirada dominante de siempre mientras mantiene sus manos entrelazadas sobre el escritorio.
Yo solo respondo a la defensiva medio segundo después de que termina con su discurso.
—Entiendo su punto pero apenas iniciamos el año. Nl pueden juzgar mi desempeño por solo 3 semanas. Estoy segura que alguien quiere ponerme el pie en esta competencia pero si lo reconforta, mejoraré mi desempeño en todas las clases para demostrarle que mi récord es intachable, ¿que le parece... 2 semanas? y terminamos con este asunto—. levanto mis cejas en espera de su respuesta.
—Me parece bien. Tiene 2 semanas—. se levanta de su escritorio y me escolta a la salida.
Asiento con la cabeza y me retiro de su oficina. Básicamente quiere presionarme para que mejore mis notas o me quitara de la candidatura, lo cual es tan injusto. Adam jamas ha sido muy bueno en la escuela pero tiene un récord en el consejo, y es cercano al profesor Peltz. Reconozco que he descuidado la escuela, he estado ocupada pensando en otras cosas pero esto me parece un sabotaje. No terminará así. Ahora todos contra mi, bien, no les voy a dar gusto.
Mi mayor problema es la clase de Física, la odio. El maestro nos hace examen cada semana, es un suplicio, no entiendo nada. Puedo manejar las demás, trabajos extras, estudiar para los exámenes, adular a los profesores y tal vez un esfuerzo mínimo pero Peltz me puso el ojo en Física y tengo que cerrarle la boca. Creo saber a quien acudir.
Al final del día Iris y yo nos reunimos para terminar los detalles de la ayuda publicitaria. Quedamos en que ella los recogería esta tarde y mañana temprano nos veríamos aquí para acomodar todo. Yo me desvio a la biblioteca en busca de mi salvación, Keith el cerebrito. Con paso apresurado y desesperado me adentro en la biblioteca y ahí esta justo donde siempre. Juro que esa silla ya tiene la forma de su trasero.
—Hola Keith—. tomo una silla y me siento frente a él.
—Oh, hola señorita presidenta— sorpresivamente desvía la mirada de su libro rápidamente hacia mi.
—¿Ya lo sabes?— me rio con nerviosismo.
—Todos lo saben—. acomoda sus lentes de manera que me vea claramente.
—¿Qué cosas, no?, bueno gracias a eso tengo un problema y... necesito tu ayuda, otra vez—. digo con inseguridad.
—Esto ya se hizo costumbre, ¿no?
—¿Crees que si no fuera importante te buscaría? Sin ofender.
—Al contrario, ¿Cuál es el problema?
—Necesito un tutor de Física o ciencias, o lo que sea. Necesito ayuda en Física— me quedo mirándolo con un poco de desesperación
Se queda pensando unos segundos.
—Yo no puedo ayudarte... pero conozco a alguien.
—¿Por qué tú no?— digo desesperada.
—Tengo cosas que hacer. No solo estoy en la biblioteca.
—Bueno, ¿entonces?
—Mañana. En el laboratorio de Química a las 3:00 pm.
—Ok—. me paro en seguida y me voy.
Un problema menos.
Ahora tengo que ir a recoger unas galletas con mi nombre y ponerles un empaque lindo. No creo que sean necesaria pero dan una buena impresión. No puedo creer el tiempo que me consume esta estupidez pero tengo que darle una lección a Adam. Él traiciono mi amistad y me insultó. Tengo que darle donde más le duele y de paso conseguimos un poco de diversión.
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Pretty Bad
Teen FictionShelly Linderman es una chica de 17 años de clase alta que asiste a un instituto privado donde pronto se suscitan situaciones extraordinarias. Aunque parece tenerlo todo, no hay nada que realmente la satisfaga. Aunque muchos la quieren, no hay nadi...