Después de la fiesta, me pasé por la habitación de mi princesa Behati. Me acerque a su cuna y la cubrí con el cobertor.
-Descansa mi corazón- me incliné y le di un beso sobre la frente.
Conforme caminaba a mi habitación, retiraba los ajustados pasadores en mi cabello. La fiesta había sido un éxito, todos quedaron complacidos y felices. Mañana por la mañana los regalos debajo del árbol serán abiertos, incluso hay regalos para Bel y las chicas, ellas han hecho tanto por mi familia que no se como agradecerles.
-Buenas noches- murmure al cerrar la puerta de mi habitación
De la nada Arafat se acercó a mi y quedé atrapada entre sus brazos, sus labios besaban los míos con intensidad. Me tomó por sorpresa, sentí sus manos deslizandose por lo largo de mi espalda hasta llegar a mi trasero que lo apretó con descaro.
-Arafat...- dije entre jadeos
-No digas nada- hundió sus manos entre mi cabello y volvió a besarme
Sentía su deseo por mi, las caricias se hicieron más intensas. Habían pasado semanas desde la última vez, que tuvimos un acercamiento de esta clase.
Me deje llevar entre sus fuertes brazos, terminó rompiendo y desgarrado los botones de mi vestido. Nerviosamente desabroche los botones de su camisa y se la quité.
Por supuesto... Arafat, era mi esposo..el único hombre al que yo amaba con todo mi ser.
-Mi hermosa mujer- susurró a mi oído, recorrió mis labios con su pulgar.
Retiró mi vestido y mi ropa interior. Estaba frente a él, desnuda y sin la menor vergüenza. Estaba sentado en la cama y yo de pie frente a él, sus manos se posaron en mi cintura, con un leve tirón me acercó a él.
Sentí su mirada sobre la delgada y fina cicatriz de mi último embarazo, besó mi abdomen y subió su manos hasta mis pechos. Solté un gemido al sentir sus dedos acariciando mis pezones.
Había un bulto que sobresalía se su ropa interior, sin pensarlo, me incline hacia a él y acaricie suavemente su "cuerpo". Vi su mirada de sorpresa, pues jamás había hecho algo así. Con agilidad, hizo que me pudiera sobre él y casi al Instante se hundió en mi.
-Arafat..- dije su nombre en un gemido.
-Sky- Jadeo y de lo más leve hasta lo más fuerte, me embestia. El placer se concentraba en mi vientre y recorría mi cuerpo en forma de escalofríos que recorrían mi columna vertebral.
***
Portaba un pijama de seda color azul cielo, a juego de una blusa de tirantes y shorts. Intenté levantarme de la cama pero un brazo al rededor de mi cintura, me detuvo.
-¿A donde vas?- preguntó Arafat un poco adormilado
-Debo ir al lavado..- susurre mientras acariciaba sus brazos
-¿Regresaras?..
-Siempre- le di un beso en la mejilla - no te dejaré solo...
Después de peinar mi cabello y cepillarme los dientes, me coloque una suave bata de color gris que, até a mi cintura.
....
Cité a Joseph después de que Arafat se fuera a atender un asunto de emergencia.
-Joseph gracias por venir- estreche su mano
-No es ninguna molestia, ¿que sucede?- su rostro mostraba preocupación.
Fuimos hasta a la habitación médica que había dentro de la mansión, cerré la puerta con el pestillo.
-Necesito pedirte algo..- caminé hasta él
-Por supuesto- contestó mientras se ponía sus guantes blancos de látex.
-Escucha Joseph...sabemos que mi último embarazo casi no la libramos. No puedo seguir teniendo más hijos..- mis manos estaban sudorosas -por eso te pido que iniciemos un tratamiento con anticonceptivos..
Joseph parpadeo un par de veces.
-Con todo respeto...¿Esta usted loca?
-¿porque debía de estarlo?
-Supongo que no quiere que Arafat s enteré...
-Así es, para él mi fertilidad es muy importante...yo...ya no puedo seguir así. El tratamiento lo costeare yo- hablé directamente
-¿Lo ha pensado bien?, ¿No más hijos para la familia real?
-Joseph, tener otro hijo seria hermoso, pero ya tomé mi decisión...Arafat no utiliza "Protección" y eso me preocupa
-¿Última relación?- preguntó -¿último período?
-Anoche- Contesté con timidez -Hace 1 semana
-Te mandaré a hacer un examen hormonal ¿de acuerdo?,
-Te lo agradezco Joseph.
***
Me encontré con Dylan en el jardín, su esposo Mustafa y su pequeña hija Maritza, quien jugaba con Behati.
-Skyler- llamó por mi nombre
-¿Sucede algo, Dylan?- sonreí.
-Por supuesto...¿Acaso crees que es decente salir vestida de esa manera?
-¿Perdón?
-Mustafa te vio en la mañana...semidesnuda...no puedes salir así de la habitación de tu esposo, y mucho menos duchada
-Creo que no entiendo nada- frunci el ceño
-No me extraña...eres ajena a nuestra cultura. Le has demostrado a todo mundo que fornicaste con mi hermano- su fea nariz se arrujo a manera de asco
-Dylan- suspire -No eres nadie para venir a decirme que hacer, no tiene nada malo bañarse por las mañanas... Quizá no lo sepas pero en mi cultura eso es la limpieza de una persona.