El teléfono se le resbaló de las manos al ver en la televisión lo que ocurrió.
"JEREMY DASHWOOD ACTUAL PRIMER MINISTRO DE INGLATERRA, DIÓ SU DECLARACIÓN SOBRE EL ATENTADO OCURRIDO DURANTE UN CONCIERTO EN MANCHESTER ARENA."
Su hermano parecía consternado y en shock, ojeras amoratadas debajo de sus ojos, hombros caídos y mirada perdida sin contar los flashes que golpeaban su rostro continuamente. Jeremy ni siquiera sonaba sincero, es más su mirada de vez en cuando bajaba hacia su tablero y leía un guión.
El televisor se apagó de la nada.
—¡Hey!— exclamó Skyler
—No veas eso..— masculló Arafat
—¿Por?— frunció el ceño.
—No quiero que nada arruine nuestra luna de miel.
Skyler se cruzó de brazos y frunció los labios molesta.—No me lo dijiste— espetó con enojo
—No te incumbe.
Ella alzó y dejó caer las manos freneticamente soltando un bufido.
—De alguna u otra manera estoy asociada en el gobierno de mi padre.
—Ya no tiene importancia ese ataque pasó hace 3 días.
—¡¡3 DIAS!!— Skyler se exaltó.
—No te exaltes..
—Si eres capaz de ocultarme estás cosas no puedo imaginar lo que sigue...
—De acuerdo te lo oculte porque tú misma dijiste que no querías arruinar nada de este viaje.
—¿Porque cada viaje que tenemos tiene que pasar algo malo?— pone una mano en la cama.
Él soltó un suspiro mientras se maldijo por sus dentros.
—¿Que vas a hacer?— pregunto Arafat con curiosidad mientras veía a Skyler de un lado a otro con su celular
—llamar a Jeremy...y le pediré que me explique todo.
***
Después de pasear por central park en NY se sentaron en un banca. Ella aún sentía un vacío en su pecho por todas esas personas que han muerto.
Llamó a su hermano y le dijo que todo estaba bien y que regresaría a casa a lado de Jasmine, ella también estaba muy preocupada por él. Arafat también tenía la culpabilidad encima pero sería más grava si ella de enterara de todo lo que está pasando con su herencia.
Skyler era más bien despreocupada y relajada en cuestión de las empresas que su padre le heredó, pasaron meses desde que no se paraba en una oficina de su petrolera y revisaba los papeles. Todo se lo había dejado a su hermano Jeremy quién le propuso llevar las riendas de la empresa cuando se fuera a su viaje de casada y que se dedicará un tiempo a su hija.
—¿Vas a seguir molesta?.
Skyler lo miró de reojo y siguió comiendo de su helado. Claro que ella se sentía molesta su propio esposo le había ocultado algo de vida o muerte que ocurrió hace tres días. Por supuesto ella sabía que ahora tenía que ser más responsable por su trabajo pero aún así estaba decidida a aplicar la ley del hielo. Arafat se frotó la frente con irritabilidad.
***
—¿Cómo salió todo?
—A la perfección.
—gracias ahora pasemos al segundo plan.
—De inmediato, nos llevaremos a la niña...
—NO— se levantó de su silla —La niña es para después, Dashwood nos prometió que ella cedería. Llámenlos
—Como usted diga.
***
—¿Hasta cuándo me vas a hablar?— Arafat iba destras de Skyler.
Ella cruzó los brazos y suspiró, un pequeño Pug corria sin rumbo alguno.
—Aww ¿Te perdiste encanto?— Skyler se inclinó y lo acarició en sus arrugas.
El Pug movia la colita enroscada con felicidad.
—Skyler no debes de acariciar perros de la calle...
—No es de la..— cerró la boca —No eres de la calle ¿verdad?— volteó su collar y una placa en forma de hueso reveló el nombre —Ramoncito eres un hermoso pug.— el perro emitió un leve ladrido
—Vaya, ¡Gracias!— un chico se detuvo frente a Skyler mientras tenia la respiración entrecortada.
—¿Perdón?— parpadeó Skyler
—Por atrapar a Ramoncito...mi Pug— el chico estaba totalmente fuera de sí por la corrida que hizo desde muy lejos por perseguir a su gordo amigo, el Pug.
—Haaaa si si, perdón— entregó el perrito a los brazos de su dueño.
—Se soltó de su correa— argumentó
—Por suerte aquí estuve bueno me dió gusto ayudar...— sonríe.
Arafat a sus espaldas estaba que ardía de los celos, fulminaba al chico con piel pálida, cabello castaño y ojos verdes que de hecho tenía una linda sonrisa. Él quito esos pensamientos de su cabeza.
—Espera..
—¿Si?— detuvo el paso de la pelirrojo
—soy Chris y ¿tú?
—Jessica— contestó ella
Arafat se aclaró ruidosamente la garganta y lo miraron confundidos
—Bueno parece que tu novio está que hecha chispas, nos vemos y gracias por todo Jessica— dijo Chris
—de nada Chris— y él chico se fue.
Skyler siguió su camino por central park en silencio con Arafat a sus espaldas. El sol se cuela por las ramas de los árboles, viento que hacían que los hojas se revolotearan por todos lados y un excelente clima en la ciudad.
***
—Vamos a cenar..— propuso él
Skyler había aguantando hasta el anochecer sin hablarle pero no estaba pensando cuando dejar de hacerlo.
Ella no le prestó atención y siguió poniendo su sujetador, quitó la toalla enrollada a su cabeza y suspiró.
—Hey— Arafat sabía que no era el momento para ponerse a pensar en cómo haría suya a su esposa. Camino hasta ella y puso sus manos a cada lado de su cadera, Skyler se estremeció al sentir el contacto de la piel de sus calientes y grandes manos sobre la suya..fría y desnuda. —Llevas horas sin hablarme...
—¿Y? Después de lo que me ocultaste te merecías algo peor— dijo en un hilo de voz.
—No quería preocúparte, perdón— se puso frente a ella
Limpio una de las lágrimas que resbalaba por su mejilla.
—Ya no lo hagas...— se puso un albornoz blanco
—De acuerdo— él asintió con el ceño fruncido.
—Te amo..— susurró ella
—Yo te amo te más— la abrazó.