En el cuarto período me tocaba la clase de Español. Me senté en el mismo lugar que el año anterior porque me gustaba distraerme junto a la ventana observando a los chicos que jugaban basketball durante el recreo.
En ese momento escuché una voz que era casi un susurro - Está ocupado este asiento? - Conocía esa voz, sabía que era él. Mi corazón empezó a latir más rápido y no pude articular una sola palabra, así que lo miré de reojo y negué con mi cabeza, mientras jugaba nerviosamente con mis pulseras. No lograba entender cuál era la razón por la que él lograba causar ese efecto sobre mí.
Él se sentó a mí lado y podía oler que su colonia tenía una suave fragancia a madera. Era embriagador. Me miró y murmuró - Traes un bonito vestido floreado, vecina - Lo miré tímidamente y con la voz temblorosa gemí - Gracias, vecino-.
-Entonces. Puedo llamarte solo Sam o prefieres que te llame Samantha? A menos que prefieras claro, que te diga llamando vecina - preguntó curioso.
-Puedes decirme Sam. Así es como me dicen todos mis amigos.- respondí con una sonrisa.
-Entonces Sam será. Por cierto, cuál es tu nombre completo? -
- Samantha Miller.
Samantha Miller parece un nombre que va contigo-
-A qué te refieres? -
- A que es un buen nombre para ti. Puede ser que me equivoque, lo cual dudo porque suelo interpretar bien a las personas, pero pareces una chica interesante. No creo que te parezcas en nada a las chicas que he conocido antes.-
- No me parezco en nada a la mayoría de chicas de aquí, eso es seguro- dije con sarcasmo.
- Pero yo no hablo de los aspectos superficiales. No sé cómo explicarlo. Es algo que está dentro de ti. Eres tímida y dulce, pero también eres fuerte y decidida. No lo sé, hay algo en tu vibra que me gusta, aunque probablemente puedas estar pensando que me volví loco- dijo sonriendo.
En ese momento me percaté de que Noah tenía una hermosa peca en su mejilla derecha, lo cual me hizo sonreír a mí también. Así que él me miró de nuevo, pero esta vez con mayor detenimiento que las anteriores.
La lección transcurrió con total normalidad ,a pesar de que sentía mis manos sudando por los nervios que me causaba estar a su lado. Al finalizar la clase me dijo como cumplido - Tienes un hermoso acento cuando hablas español -
Sonreí - Gracias. Lo hablo desde pequeña gracias a mi madre- dije con aire de suficiencia.
-Pues entonces supongo que esta será mi clase favorita a partir de este momento - susurró en mi oído y podía sentir su respiración acelerada y su cuerpo caliente cerca del mío. Tuve que tratar de recordar por un segundo cómo inhalar aire hacia mis pulmones. Entonces lo miré y con voz divertida le dije - Dice mi madre que es el idioma más sexy que existe. Que no hay mejor manera para conquistar a las chicas. Así que supongo que sí. Esta debería ser tu clase favorita- y le guiñé el ojo. Sabía que así no notaría que me había hecho sonrojar. Luego salí del aula a toda prisa.
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HERMOSA IMPERFECTA
Teen FictionSamantha Miller era un chica simple, timida y hasta un poco torpe, que sin saber bien cómo, había logrado conquistar al chico de sus sueños. Su vida parecía perfecta... pero un secreto en él y la llegada de su nuevo vecino de al lado, harían que tod...
