CORAZÓN PARTIDO

28 4 1
                                    

Emma me había consolado todo el camino a casa.

Cuando al fin llegamos mamá estaba esperándonos en la puerta y cuando me vio cubierta de lágrimas y con mi pelo enmarañado se abalanzó hacia mí para abrazarme

-Lo perdí, mamá, lo perdí - dije una y otra vez, mientras pesadas lágrimas caían sobre mis mejillas.

- Vas a estar bien cariño. Aquí estamos contigo. Todo va a estar bien. Eres una chica fuerte, lo sabes ¿verdad? -- dijo mamá acariciando mi rostro.

Yo la abracé como nunca antes lo había hecho. Necesitaba sentir el apoyo de mi familia, porque no sabía cómo podría pasar sola por esto.

Me acosté en la cama de mis padres - como lo hacía de niña cuando me sentía muy enferma - y Emma y mamá se acostaron a mi lado. Lloré mucho, lloré amargamente por horas hasta quedarme profundamente dormida.

Tanto dolor y tanta culpa solo podía compararlos con la muerte de Meghan, estaba herida. Mi corazón se había partido en dos. Sentía que todo en el mundo a mi alrededor se había destrozado.

La mañana siguiente una voz de terciopelo me despertó - Hola hermanita - dijo Tommy besando mi frente.

- Hola - respondí ronca. Mi garganta dolía de tanto llorar.

- ¿Cómo te sientes? - inquirió con esos enormes ojos verdes que me miraban con pesar.

- No lo sé. Es tan extraño saber cuán difícil fue para Noah y para mí coincidir, cuán difícil nos resultó enamorarnos, para que ahora dejemos ir todo esto tan maravilloso que había entre nosotros así de rápido. - dije con la voz vacía - Es que no lo entiendo. No sólo perdí a mi novio, perdí a mi mejor amigo. Perdí a una de las pocas personas con las cuales he logrado abrir mi corazón. Es como si cada persona a la que llego a amar de corazón tuviera que alejarse de mí - y entonces empecé a llorar de nuevo.

Mi madre entró en ese momento a la habitación y me interrumpió - No digas eso cariño. Vas a estar bien. Sé que ahora tienes el corazón roto y que ves todo gris pero tarde o temprano vas a sanar. Eres una buena chica y mereces ser feliz, ya has pasado por mucho -.

Asentí mientras mi madre y mi hermano me abrazaban fuertemente y nos quedamos en silencio durante un largo rato.

Al cabo de una hora, papá gritó desde la planta baja - Vengan todos. Que preparamos un delicioso almuerzo -

Limpiándome las lágrimas pregunté - ¿Preparamos? ¿Qué quiere decir papá con eso?

-Tu padre y Emma querían darte una sorpresa -. Entonces me levanté de la cama y sin mirarme al espejo - por miedo a no reconocerme - bajé al comedor.

La mesa estaba servida con cinco platos de spaghetti hermosamente decorados, mientras papá y Emma nos miraban orgullosos.

- ¿Hicieron todo esto por mí? - pregunté asombrada y ambos asintieron.

Entonces sonreí y papá se acercó a mí y besó mi cabeza - Sabes que es lo que te hace ser tan especial - negué y él continuó - Que brillas hasta con el alma rota. Brillas más que el sol niña mía-.

Entonces una lágrima cayó en mi mejilla y papá rápidamente la limpió - No llores más mi niña. Piensa que estás muy joven y aún te quedan un montón de batallas para luchar. Si supieras lo hermosa que te ves cuando sonríes -

Cerré fuertemente mis ojos para asimilar cada palabra que había dicho mi padre. Tenía razón, debía ser fuerte, porque me quedaban aún muchos obstáculos en la vida. Así que decidí que al menos por un rato dejaría de llorar, ya bastantes horas me quedaban por delante. Tendría hasta la eternidad para poder desahogarme.

HERMOSA IMPERFECTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora