Conociendo a Dylan O'Brien

Capítulo 38

    Caminé hacia la puerta con una sensacion mala en el cuerpo. Y mis peores miedos fueron hechos realidad. Delante mía se encontraba un Cody sonriendo. No me fige que llevaba un ramo de flores hasta que entró.

- ¿Cody? ¿Cody Christian? - preguntó mi padre asombrado.

- Cuanto tiempo sin vernos, señor Hennig.

    Se saludaron estrechando las manos mientras que yo les miraba con la boca abierta. ¿Qué hacia él aquí? ¿Acaso era un sueño? Mejor dicho, ¿una pesadilla?

- Hola Shelley - me saludó el rubio entregando el ramo de flores.

- Eh...

- ¿Quién es?

    Apareció mi abuela en la entrada, cuando vio a Cody, sonrió de felicidad.

- El pequeño Cody.

- Ya no soy tan pequeño, señora - él sonrió dándole un abrazo.

- Pero que guapo te has vuelto. Ven, pasa al salón. Shelley, prepara algo a este chico encantador.

- No hace falta, he traido una caja de pastelitos.

    Se agachó y recogió la bolsa que había en el suelo. ¿Llevaba ahi desde el principio?

    Nos movimos todos al salón, yo sin perder de vista al rubio. ¿Qué había planeado esa mente malvada?

Me senté en la otra esquina del sofá, lo más lejos de él. Y fue un error, porque la caja estaba a su lado. Maldecía mi estupidez. El rubio me pasó la caja con un movimiento sin apartar la vista de mí.

- Gracias - dije con voz seca.

- ¿Y qué hay de tu vida Cody? - preguntó mi abuela - He oido que sales en la misma serie que mi niña.

- Veo que esta muy enterada - rió Cody - Es genial poder trabajar en la serie y encima con mi mejor amiga de la infancia.

    Giño de ojo por su parte hacia mí. Ignoré totalmente ese gesto.

- Cuanto tiempo sin verte Cody - dijo mi hermano mayor Kevin al entrar en el salón.

    Detrás suya venían tambien Glenn y Brad. Este último seguía teniendo varias ojeras, seguramente por el cansancio. Yo temía que en cualquier momento volviera a estar enganchado al alcohol.

- ¿A que es muy guapa mi hermana? - dijo Kevin.

    ¿A qué viene eso ahora?¿Por qué ha sacado eso ahora? ¿Quiere morir?

- Aaaaa... - dijo Cody.

- ¿Quieres morirte joven, Kevin? - dije - Porque veo que pronto tendremos un funeral.

- Con solo decir que es guapa bastaba, Cody - dijo Glenn.

- Dos - dije levantando dos dedos.

- ¿Dos qué? - preguntó Cody ya perdiendo el hilo de la conversación.

- Funerales. Pero creo que serán tres.

- No seas así - me interrumpió mi abuela - Cody sabe perfectamente que eres una chica hermosa...

- Ya...

- ... Y con mucho talento. Sería muy afortunado si salieras con él...

- Abuela...

- ... Para serte sincera siempre quise que formarás una familia con Cody.

- ¿¡Qué!?

    Incluso Cody se atragantó con el pastelillo de chocolate que estaba comiendo.

Narrado por Dylan

   Estaba en la cama sin hace nada. Algo muy poco inusual en mí. Me aburría mazo y eso era un problema.
Cogíel móvil y le envié un mensaje a mi novia. Pero ella no contestó como siempre hacía. Tal vez estaba ocupada.Pero el aburrimiento me estaba matando. Decidí ir a verla, por mucho que me había dicho que no fuera.

    Salí de mi casa, cogiendo mi coche, y en pocos minutos estaba donde la casa de Shelley. Le envié un mensaje a Shelley que estaba ahí. En menos de un minutos, ella salió de la casa. Parecía agitada y muy sorprendida. Se acercó a mi coche, donde estaba apoyado.

- Hola amor - sonreí.

- ¿Qué haces aqui?

    El tono de Shelley no me gustó. Pensé que se iba a alegrar al verme, al menos unos minutos.

- Te echaba de menos.

    La oí suspirar. Ultimamente la sentía algo distante, incluso parecía ya no disfrutar de nuestros momentos juntos. Me mordí la lengua para no comentar nada de eso. Tal vez se pasaría.

- Te dije que estaba con mi familia, Dylan.

    Iba a decir algo, pero me quedé sin palabras al ver a Cody en su puerta. ¿Qué hacía ese desgraciado ahí?

- ¿Y él es parte de la familia?

    Señalé enfadado al rubio. Me dolía mucho que mi novia no lo había comentado.

- No fue invitado. Él vino sin más - ella me sujetó de las manos y me obligo a mirarla - Se irá...

- Yo solo veo que él sí es parte de tu familia, mientras que yo soy una simple decoración.

    Solté las manos de Shelley para volver al coche. Ella intentó pararme, pero ya era demasiado tarde. Entré en el coche y me fui de ahí. Lo más lejos posile. Me sentía herrido, traicionado y sobretodo, perdido. No sabía muy bien qué era lo que nos pasaba a Shelley y a mi, pero ese vacío entre los dos, se hacía cada vez más grande. Y temía que no se podía arreglar.

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CINSERAMENTE YA NI SÉ CUANTO TIEMPO HA PASADO SIN QUE HE ACTUALZADO. A TODOS MIS LECTORES LES PIDO PERDON.

NO TENGO UNA ESCUSA VÁLIDA NI NADA POR EL ESTILO. SIMPLEMENTE NO TENÍA INSPIRACIÓN, Y LUEGO ME VINO LA PEREZA, HASTA QUE YA PERDÍ LAS GANAS DE ESCRIBIR.

AHORA, CON ALGO MÁS DE TIEMPO, HE DECIDIDO RETOMAR ESTO, YA QUE NO ME GUSTA DEJAR LAS COSAS SIN FINALIZAR.

ME HE PREPUESTO SUBIR UN CAPÍTULO CADA SEMANA, ASI QUE VEREMOS CUANTO VA HA DURAR MI CONSTANCIA.

UN ABRAZO DE PANDA 💖🐼