Estaba aún en la cama después de apagar la alarma. Era las seis de la mañana. Cerré los ojos por cinco minutos. Al abrir los ojos, el reloj marcaba las ocho y cuarto.
"¿WTF?"
Salí escopeteada de la cama, tropezándome y dándome una ostia tremenda. El día no podía empezar peor. Me duché lo más rápido posible, desodorante, maquillaje y un moño horrible que parecía más a un nido de pájaros que mi pelo. Todo eso en siete minutos. Me lancé literalmente sobre la nevera para coger algo comestible. Ya me lo comería por el viaje. Pero solo encontré un yogur con una nota "De mama, no tocar" y millones de botellas de agua. Ay si, también el bote de mayonesa. Ahí es cuando me replanteé sobre cómo había sobrevivido todo este rato.
Salí de mi casa en dirección al garaje, pero mi coche no estaba allí.
- ¡Papa!- volví a entrar en casa - ¿Dónde está mi coche?
Mi padre, que estaba viendo un programa en la tele, se giró con cara de póker para mirarme.
- ¿Qué pasa con tu coche?
- ¡Qué no está en su sitio!
- ¿Dónde sacarán esa pintura?
- ¡Papa!
- Lo cogió tu madre. Te lo dijo ayer, que lo iba a coger.
- ¿Y ahora cómo voy al set?
- Es increíble de cómo hacen las reformas en las casas – dijo mi padre mirando el programa.
- ¡Papa!
- Te llevo yo, tranquilízate. Vete a vestirte.
- Ya estoy.
- ¿Vas en pijama?
- No es un pijama. Es una camiseta algo ancha.
- ¿Algo? Parece un saco. Tienes buen cuerpo, no te tienes que avergonzarte.
- ¡Papa! ¡Ya llego tarde!
- Entonces no entiendo por qué tienes prisa si ya llegas tarde. Total, por media hora más.
- ¡Tengo una grabación en cero coma!
- Desayuna primero.
- Pero si no hay comida.
- Es verdad. Por eso tu madre fue a la tienda.
- ¡Entonces llévame a las grabaciones!
- ¿Es la misma escena que lleváis grabando un siglo?
- Ya grabamos la escena de la ducha, papa. Ahora es otra. ¡Muévete que no llegamos!
Y eso era un milagro, porque la última grabación con Dylan se grabó sin ningún problema. Mi padre se levantó a cámara lenta.
"Seguro que lo hace para sacarme de quicio."
De pronto mi teléfono sonó.
- ¿Si?
- Hola, soy Tyler. Tyler Posey.
- Hola Tyler. Si llamas para saber por qué llego tarde es que me...
- No, no, no. Me dio tu teléfono Ty – añadió algo inseguro – Espero que no te importe.
- Qué va – el día que salí con Ty a tomar helado, él me pidió el teléfono - ¿Qué querías?
- No sé si es el buen momento, pero...
- No es un buen momento – le interrumpí – Llego con bastante retraso.
- No te preocupes, te he podido cubrir las espaldas.
ESTÁS LEYENDO
Conociendo a Dylan O'Brien
FanfictionShelley, decepcionada por no llegar a tiempo a un casting, entra en una cafetería para tomar algo. Era su última oportunidad para demostrar a su padre que quería ser una actriz y la dejo ir. Lo que no sospecha es que alguien la esta observando. Y es...