Al momento de que Daniela tomó mi mano me guío hasta la entrada de su casa. Casi caía en el intento de seguir sus pasos por la culpa de los estúpidos cordones de mis tenis. Me hicieron pasar vergüenza...
Cuando llegamos a la puerta, ella la abrió lentamente, miré hacia atrás y observé cómo Santiago todavía nos seguía viendo, debo admitir que me puse incómoda por un momento, me preguntó que relación tiene con Daniela, se comporta muy extraño para ser solo su chófer.
—Entra— ella se dió cuenta de mi mirada hacia él —Todavía nos mirá, no confía en ti.
—¿Por qué no lo haría?— pregunté entrando. Quede muda a la inmensidad de la casa, simplemente... wow.
—Santiago es muy sobreprotector— respondió cerrando la puerta a su espalda.
—¿Así?, ¿y eso?— quedé en medio del pasillo. Sinceramente no sé que hago aquí, no se que hacer y no sé cómo marcharme.
—Simplemente...
—¡Hola Dani!— de la nada un hombre mayor salió de una zona de la casa, me sorprendió mucho su aparición.
—Hola pa'— ellos dos se dieron un abrazo. Cuando se alejaron, él se percató de mi presencia.
—Hola— saludó —¿Eres una nueva amiga de Daniela?, nunca te había visto por aqui.
—Sí— respondió ella por mí. La mire extrañada, eso no es verdad... bueno, ya da igual a estas alturas.
—Bienvenida entonces— dijo con una gran sonrisa. Me sorprendí de su simpatía, algo que no encuentro en Daniela —Por cierto, ¿cuál es tu nombre?— preguntó.
—María José— respondí.
—Poché— ella contestó.
Parce, que obsesión en responder por mí.
—Bueno... Entonces, ¿Te llamas María José Poché?— él rió por nuestras respuestas.
—¡No!— negué rápidamente —Me llamo María José pero me dicen Poché— mencioné con una sonrisa nerviosa.
—Que lindo nombre, pero vamos, entra, me gusta conocer nuevas amigos y amigas de Dani— su tono de voz se escuchaba muy entusiasmado, como un niño pequeño.
Solo ví como ella se golpeaba la frente, parece que no disfrutará esto pero... yo sí.
Su padre me invitó a la sala de estar. Para ser una casa lujosa la sala está muy acogedora. Consistía en sillones acomodados en forma de "L" en curva, con cojines decorativos color rojo vino y grises, en el centro está una mesita de cristal y enfrente de esta la televisión colgada en la pared blanca. Toda la sala tenía las paredes de ese color. Al lado izquierdo había un pequeño bar donde las sillas y su barra son de madera oscura y finalmente, al lado derecho, está un ventanal del tamaño de la pared, tiene cortinas de color beige y dan vista al jardín.
—Bien, siéntate con confianza, es tu casa— dijo señalando uno de los sofás grandes.
Lo obedecí, al igual que Daniela. Él mencionó que irá a la cocina, nosotras asentimos y salió de ahí dejándonos solas.
—Creo que tienes que aprovechar esto para irte, inventare cualquier cosa— me susurró ella al lado mío.
—¿Ahora cambias de opinión?, tú me hiciste entrar a tu casa— crucé mis brazos, no me iré, ahora no.
—¿Qué buscas aquí?, Solo es una casa con puertas y ventanas, no tengo un tesoro oculto por si piensas eso— ella bufó recargándose en el respaldar del sofá.
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Alguien Como Ella | TERMINADA
FanfictionCalle es una chica con un futuro prometedor y Poché con un pasado que la persigue. Calle esta rodeado de gente que la quiere y Poché se aísla alejando a todo aquel que quiera acercarse. Calle es buena hija y Poché trata de serlo. Aún siendo tan dife...