Alguien Como Ella | TERMINADA

Inseguridades

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Escuché el celular de Poché sonar en una de sus mesitas de noche, no es por ser curiosa pero le di un rápido vistazo levantandome un poco del sofá solo para ver quién es. Bufé al ver en la pantalla resaltar el nombre de "Mario" con una solecito, ¿por qué le tuvo que poner un solecito?, agh.
Tuve que sacar fuerza de voluntad para no contestar y saber que quiere, además de que son cosas privadas de Poché, debo de respetarlo. Después de unos segundos dejo de sonar, por fin.
Justamente en ese momento Poché salió del baño vistiendo una camisa grande que cubre sus muslos. Al notar mi presencia, me miró de abajo hacia arriba, sorprendida, parece que no se esperaba que todavía siguiera ahí.

-¿Calle?, pensé que ya te habías ido- mencionó aplicándose un poco crema en su rostro -¿Qué haces todavía acá?

Mi atención se concentro en su cara ya sin maquillaje, es la primera vez que la miró así.

-¿Calle?- ella se dió cuenta de mi mirada fija y noté que se puso incómoda.

-No, yo... quiero estar hasta que duermas por si necesitas algo- me excuse nerviosa en mi lugar. En realidad es verdad, planeo hacer eso.

-No soy una niña- mencionó cruzando los brazos. Pensé que lo decía en tono molesta pero después soltó una carcajada -Pero sí así lo deseas, por mí no hay problema.

Ella caminó para rodear su cama, tomó el borde las sábanas y las jaló dejando descubierta la parte izquierda de esta.

-¿Acaso tratas de decirme que me quedé?- dije con una ceja alzada.

-No trato, te lo estoy diciendo- respondió levantando y dejando caer sus hombros despreocupadamente -Quédate.

Puse cara de estar pensando en lo que dijo, pero en realidad, no tengo nada que pensar.

-Bien, me has convencido.

Ella se acostó tapándose hasta su estómago, después giró el rostro para verme.

-¿Y solo te quedarás viéndome ahí dormir?- preguntó. No contesté a eso -Acosadora.

-Otra cosa no puedo hacer- contesté jugando con el anillo de Poché en mi dedo.

-Ven- dijo. Levanté la vista encontrando a Poché invitandome a dormir junto a ella.

-¿A dónde?- pregunté, queriendo ignorar lo que me pide.

-Pues no será a China, ¿verdad?- giré los ojos por su bromita -¿Acaso esperarás en ese sofá incómodo?

-Bueno, eso tengo en mente- dije -Además es muy cómodo.

-Estarás mejor acá- me sonrió insistiendo otra vez.

Respiré hondo y suspiré. No me hice del rogar y me quite mis tenis acercándome a la orilla de la cama. Levanté las sábanas y me metí en ellas.

-Deberías quitarte la chaqueta- mencionó Poché acomodándose mejor. La miré con las dos cejas alzadas y ella entendió el mensaje -¡Lo digo porque debe ser incómodo!- aclaró sonrojada moviendo las manos exageradamente.

Me reí por su cambió actitud y la obedecí. Me quite la chaqueta dejándola caer al suelo.

Al acomodarme en la cama, me di cuenta que Poché hace muchos movimientos para encontrar una pose para dormir, no sé sí sea siempre así, o solo lo hace porque le duele el golpe y busca una posición adecuada para no lastimarse.

Después de algunos intensos movimientos, ella bufó y se acomodó boca arriba igual que yo. Giré mi cabeza para verla, note pequeñas marcas en su rostro que antes no había visto, específicamente como manchitas en la piel cerca de su mentón.