Alguien Como Ella | TERMINADA

Cita pt. 2

-Gracias- habló Poché un poco tímida.

-Si te va a dar pena no te pongas eso mejor- dije al verla avergonzada.

-Ya, así me quedo- respondió posicionándose frente su espejo. Ella movía su pelo así como su cuerpo para ver si no había algún defecto que arreglar.

-Entonces, ¿falta solo maquillarte?- pregunté viendola desde su cama.

-Si, puedo con eso- ella suspiró tomando su paleta de pinturas.

-Como quiera no te iba a ayudar- murmuré tomando un osito de decoración que estaba sobre su cama -Ay, eres una bebita, tienes todavía peluches, que tierna- dije totalmente encantada.

-Es de Vale- susurró concentrada en sus ojos.

-Si claro, y yo soy la loca de los gatos- comenté lanzando el peluche hacia arriba para que después cayera sobre mis manos.

-Pues no te falta mucho, solo los gatos- dijo aplicándose un labial claro.

-No estoy loca- repliqué abrazando al peluche y haciendo un puchero.

-No es mío- volvió a decir refiriéndose al oso.

-Como digas- rodeé los ojos sin querer continuar la mini pelea.

Ya habían pasado minutos y Poché seguía maquillándose, no entiendo como puede tardar tanto.

-¿Y a dónde van?- jugué con el oso dándole vueltas. Después imite una voz aguda, como si estuviera hablando con él.

-A un cine- respondió girando a verme.

-Uy, los cines son un buen primer paso para futuras parejas- mencioné para molestarla un poco.

-Calle no ayudas- giró para verme -No adelantes nada, ni siquiera sé si considerarlo un amigo.

-Solo bromeó, pollo- le lancé el peluche y lo atrapó con mucho cuidado, como si de tratase de un objeto de cristal.

-¡Calle!, deja a Pedro en paz- lo colocó de cuidadosamente sobre la cama.

-Poché no puedo creer que le hayas puesto nombre a un peluche- bufé soltando una carcajada. Es demasiado tonto, como ella... bien, ya todo tiene sentido.

-Valentina así le puso y así me acostumbré, así que deja a Pedro tranquilo- regresó a dónde estaba aplicándose un poco de perfume.

-Ey, señora perfecta, ya deja eso, pareces que te vas a casar, solo es un pequeña cita- la seguí hasta donde estaba -Y dices que ni siquiera lo consideras un "amigo"- me burlé de ella. Poché me miró, y me roció perfume en la cara -¡Oye!- dije escupiendo lo que alcanzó a entrar en mi boca.

-¿Cómo me veo?- preguntó dando un giro en plan diva.

-Te ves muy mal- mentí limpiando mi cara con el cuello de mi camisa.

-¿En serio?- preguntó regresando al espejo.

-Ush no tonta, te miras bien- la jale de la muñeca para que por fin se alejará del espejo y quedará frente mío. Acerqué mis manos y le arregle un poco el pelo. Que insegura, se ve perfecta.

-Quiero que salga todo bien, no quiero hacer las cosas mal, Mario es un chico agradable y estoy haciendo mis esfuerzos por conseguir amigos- confesó con entusiasmo. Si que parece una niña en su primer día de clases -Me siento muy sola en esta ciudad.

-Saldra bien, lo prometo- sonreí a lo que dijo -Y hablando sobre lo segundo, ¿soy invisible?, Poché, si tu cita no llegará a funcionar, tienes a Sebas, a Paula... y a mí- añadí. Poché de quedó observandome y después sonrió.