El año nuevo había empezado muy bien para todas. Por fin se respiraba algo de calma después de tantos años de guerra, aunque los ejércitos extranjeros no dejaran de recordarles que habían ganado la guerra y ahora mandaban ellos. Reconstruir el país iba a costar años pero poco a poco se iban haciendo cosas. Los Juicios de Núremberg seguían teniendo lugar en esa ciudad que había sido tan destruida por la guerra, y muchos dirigentes nazis seguían siendo condenados por sus atroces actos, aunque a Clarke le parecía que había mucha más gente para condenar. Puede que la gran mayoría recibieran órdenes pero el ser humano siempre puede elegir, y ellos eligieron hacer daño a los demás. Otros, como ella y sus amigos, en cambio escogieron ayudar en lo que pudieran y como pudieran y ahora parecía que todos los alemanes estaban en el mismo saco.
Octavia, Raven y Lincoln habían vuelto a Estados Unidos poco después de que empezara el año y Clarke ya echaba de menos a sus amigas, el haberlas vuelto a ver le hecho revivir viejos tiempos y ahora volvían a faltarle, y aunque la guerra había terminado y podrían irse viendo más a menudo, no dejaba de soñar en que pudieran volver a vivir en el mismo sitio todas juntas, de nuevo.
El sitio ya daba igual, ahora para ella lo importante era estar cerca de la gente que amaba y poder cuidarlos y dejar que ellos la cuidaran a ella. Con Lexa ya habían decidido que una vez que Clarke hubiera conseguido la custodia de Madi se marcharían a Nueva York con Raven y Octavia y empezarían una nueva vida. No habían dicho nada a nadie, no lo harían hasta que todo estuviera resuelto, pero a Madi ya habían empezado a enseñarle inglés y aunque la niña no terminaba de saber el porqué de eso le gustaba aprender cosas nuevas y lo aprendía con rapidez.
Hope ya había empezado a comer triturados e incluso ya le había salido algún que otro diente. La verdad es que comía muy bien, aunque como a todos los niños le gustaba pringarse con la comida. Ahora que empezaban a salirle los dientes estaba más mimosa y quejosa de lo habitual, pero como había pasado desde que había nacido, siempre había unos brazos disponibles para mimarla y cuidarla, incluso los de su hermana Madi, que ahora que la pequeña empezaba a hacer más cosas estaba mucho más contenta y divertida con su hermana. Aunque la verdad sea dicha, a veces la pobre Hope pagaba el pato y le tocaba hacer de la muñeca de su hermana, aunque también es cierto que parecía encantada con las atenciones que recibía por parte de su hermana mayor.
Una vez pasado el invierno por fin llegó la esperada citación. Klaus les informó que esa última semana de marzo por fin podrían reunirse con los responsables para empezar a tramitar la adopción de Madi. Podría ser un proceso algo lento, sobre todo porque había muchas peticiones ya que la guerra había dejado muchos niños huérfanos, pero esperaban que todo se dieran con normalidad. Lo primero sería que tanto Clarke como Madi tendrían que declarar. A Clarke no le hacía mucha gracia que Madi tuviera que pasar por eso ya que no dejaba de ser una niña de seis años que ya había sufrido bastante, pero según le dijo Klaus, el hecho de que Madi verbalizara ante ellos que quería formar parte de la familia Griffin les ayudaría a conseguir el objetivo más que cualquier otra cosa.
Cuando llegó el día nadie sabía quien estaba más nerviosa, si Clarke o Madi. Toda la familia fue junta al juzgado aunque solo Clarke y Madi pasaron al interior de la sala junto con Klaus. Era mejor que nadie supiera de la relación de Lexa con Clarke, ni siquiera Klaus lo sabía aunque las había visto varias veces juntas y seguro que tenía sus sospechas. Aprovecharon que había un parque cercano y fueron con Hope a la zona infantil, y es que ahora que ya gateaba, a una velocidad supersónica, tenía mucha energía que quemar. La espera se les hizo eterna a todos, menos a la pequeña Hope que parecía encantada con la novedad.
Por su parte Clarke y Madi esperaron nerviosas a que llegara su turno. Cuando entraron el juez que examinaría su caso ya estaba en el estrado, junto con un asistente social que también tendría que evaluar el caso. Klaus expuso toda la historia y entregó toda la documentación encontrada sobre la niña como el acta de nacimiento donde no costaba ningún padre, el certificado conforme la madre era huérfana y que había sido hecho presa junto con la niña por los nazis. Desgraciadamente al morir en el tren no había ninguna prueba de la defunción de la madre pero todos tenían la esperanza de que los testimonios de Clarke, y sobre todo de Madi, fueran más que suficientes.
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El Poder del Amor (Clexa AU)
FanfictionBerlín 1937 Clarke es una chica de dieciocho años que está estudiando en una de las escuelas de enfermería que la Cruz Roja tiene en Berlín. Clarke proviene de una familia acomodada gracias al negocio de su abuelo. Su padre es médico del ejército al...