Capítulo 14: Celebración

2.9K 279 181
                                    

Los días y las semanas habían ido pasando. Clarke había empezado su segundo y último año de estudio para ser enfermera, y al menos dos o tres tardes a la semana las pasaba con Lexa, ya fuera en la librería, o bien salían a dar una vuelta o merendar. También habían pasado algún sábado o domingo con Octavia y Raven. No habían hecho nada especial a parte de pasar tiempo juntas.

Si que quedaron un día para poner en común sus opiniones sobre los libros leídos. A Clarke tanto Orgullo y Prejuicio como Sentido y Sensibilidad le habían gustado, le pareció que la autora tenía una manera de escribir que enganchaba y le gustaba la forma que tenía de expresar los sentimientos. Aunque, a decir verdad, ambos libros le parecieron bastante similares, ambos tenían un argumento similar, una familia con hijas donde el padre muere y debido a que no había herederos masculinos en la familia, pierden sus posesiones. Si bien las historias después siguen caminos diferentes e historias románticas diferentes, el fondo es el mismo. Así que pese haber disfrutado de sus lecturas Clarke opinaba que la autora se había encasillado en lo mismo, tendría que leer otros libros para saber si realmente pensaba cambiar los argumentos de sus libros o siempre iban a ser lo mismo.

A Lexa Los Miserables también le gustó mucho. En realidad, había disfrutado de esa obra de que nunca pensó que le podría llegar a gustar. Pese a ser una obra con personajes con situaciones muy difíciles de afrontar, éstos nunca se rinden y el deseo de una vida mejor hace que siempre intenten superar todas las dificultades que se encuentran en su camino.

Lexa estaba intrigada en saber qué es eso que hacía que a Clarke le gustara tanto del libro, porque pese a que lo había disfrutado mucho, tampoco es que le pareciera que hubiera algo destacable en él.

- Es un libro que no pasa de moda. – Dijo Clarke.

- ¿Cómo? Narra acontecimientos del siglo XIX ¿Cómo no van a haber cambiado las cosas desde entonces?

- Si, efectivamente narra acontecimientos de la Francia del siglo XIX. Habla sobre como los pobres, los oprimidos por sus ideas o por su condición, son relegados de la sociedad. Habla sobre cómo éstos intentan unirse para hacerse oír y como son aplastados sin impunidad alguna. ¿Qué pasa ahora? Ahora los oprimidos son los judíos, los homosexuales, los comunistas, los discapacitados... solo porque sus ideas y creencias no son las mismas que Hitler. ¿Y qué hace él? Oprimirlos, ahogarlos, no permitir que se levanten contra él. ¿Y qué hará? Las cosas van a ir a peor, porque hay a gente que lo que él hace ya le va bien, va muy bien para sus intereses, sobre todo los económicos, que parece ser lo único que importa hoy en día. ¿Y qué pasará dentro de unos meses? Que esto seguirá pasando. ¿Y qué pasará en el siglo XXI? Qué esto seguirá pasando. Por mucho que pasen los días, los meses, los años e incluso los siglos, el ser humano seguirá tropezando con la misma piedra, seguiremos destruyéndonos unos a otros, por el poder, por el dinero o porque no pensamos igual, ideológicamente hablando, o porque no tenemos las mismas creencias. El ser humano parece que está destinado a destruirse a sí mismo, está destinado a no aprender nunca y seguir cometiendo los mismos errores una y otra vez. Está destinado a no ser humano.

Lexa se quedó pensativa durante un buen rato, asimilando todo lo que había dicho Clarke, para llegar a una única conclusión. Todo era completamente cierto.

- ¿Crees que las cosas irán a peor? – Preguntó Lexa.

- Si. – Fue la sincera respuesta de Clarke.

- ¿Cómo?

- No lo sé. Pero estoy segura de que ese cabrón y sus secuaces van a hacer mucho daño a Alemania, y puede que más allá.

- No sé Clarke... ¿Tanto poder tiene?

- Está obsesionado con la raza aria y todo lo demás para él debería desaparecer. Y mucha otra gente piensa así, incluso niños. ¿Tanto poder tiene? Desgraciadamente sí.

El Poder del Amor (Clexa AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora