El Poder del Amor (Clexa AU)

Capítulo 65: Nueva York

El día de la partida había llegado. El día anterior llegaron a la ciudad desde donde partía el barco hacía su nueva vida, acompañadas por sus padres y sus abuelas. Habían dormido en un hotel y después de un buen desayuno se encontraban en el puerto esperando a embarcar en el barco que las llevaría a su lejano destino. Las chicas estaban nerviosas, Madi estaba a la expectativa y Hope no entendía nada pero se había contagiado del nerviosismo de sus madres.

Cuando llegó el momento de embarcar también llegó el momento de las despedidas, las lágrimas no tardaron de aparecer, así como las promesas de mantener el contacto y la más importante de todas, que finalmente se reunirían todos en Nueva York antes de las Navidades.

Hacía dos días ya se habían despedido de los amigos que dejaban atrás. De Luna, Derrick y Aden que parecían que poco a poco se amoldaban a su nueva vida y su nueva familia. Sin duda la aparición de Derrick había sido todo un milagro, pero no era el único que había ocurrido después de la guerra, todavía había gente buscando a familiares y amigos y algunos pocos afortunados como Derrick lograban encontrarlos.

También se habían despedido, y con mucho pesar, de Harper y Ontari. Sabían que sus amigas quedaban en buenas manos y protegidas por sus padres pero no dejaban de ser un apoyo para ellas debido a que su situación era similar a la suya, su amor también era perseguido y estaba mal visto. Les dijeron que si alguna vez querían ir a Nueva York tenían las puertas de su casa abiertas, que no duraran en que pese a la distancia siempre se apoyarían unas a otras.

Después de las tristes despedidas había llegado el momento de embarcar. Clarke cargaba con Hope en brazos y Madi iba de la mano de Lexa. Habían cogido un camarote para las cuatro en primera clase. Al ir en primera clase tuvieron ayuda en llevar todas sus pertenencias a su camarote y una vez lo hubieron dejado todo salieron para despedirse de sus padres y sus abuelas cuando el barco zarpara. Se dirigieron a cubierta y allí los vieron, a lo lejos, diciéndoles adiós. Cuando el barco definitivamente zarpó ninguna pudo evitar que las lágrimas acudieran a sus ojos, lo mismo que aquellos que quedaban en tierra. Se quedaron allí hasta que la costa desapareció de su vista, entonces se encaminaron de nuevo a su camerino para dejarlo todo organizado antes de la hora de comer. Por el momento el mar estaba en calma y aunque notaban su cuerpo algo extraño no habían llegado las nauseas ni los vómitos. Madi y Hope parecían encontrarse perfectamente bien así que el viaje parecía que empezaba bien y eso era buena señal ¿no?

Finalmente el viaje les fue bastante bien, solo tuvieron un par de días malos con tormenta incluida. Las niñas ni siquiera notaron el vaivén del barco, Clarke y Lexa no tuvieron tanta suerte y los días que el mar estaba más revuelto no les sentaban del todo bien, aunque por suerte no les sentaba tan mal como a otros pasajeros.

El peor día fue el de la tormenta porque Madi lo pasó muy mal. Puede que ya no soñara que la iban a separar de las chicas pero los ruidos fuertes, como los truenos, todavía le daban pánico a pesar de saber que ya no eran aviones dejando caer bombas sobre ellos. Pero sabía que tenía a Clarke y Lexa con ella para consolarla y protegerla.

Los días en el barco se hacían un poco pesados para las niñas, sobre todo para Madi, que se aburría bastante, pero a veces jugaba con otros niños que también viajaban en el barco, siempre sin separarse mucho de Clarke o Lexa, siempre pendiente de donde estaban para no perderse.

El día pasaba entre paseos y juegos e ir al comedor a las horas de las comidas. La comida no era nada del otro mundo pero para gente que ha pasado tanta hambre cualquier comida era como un manjar. Por suerte la pequeña ya había empezado a comer la comida a trocitos, pequeñitos eso sí, y ya comía casi de todo, así que no tuvieron mucho problema para que comiera, por suerte era de buen comer.