¡Hey! Felicidades atrasado hermosa, espero que lo hayas pasado bien. <3
Tres días encerrada en mi habitación. Llegué a la conclusión de que soy una carcelera, pero una que quiere estar encerrada por varias razones, no salí de mi cama (excepto cuando quiero ir al baño). Siento como se derrumba poco a poco la muralla que un día lo creé. Mi almohada está acorralada por mis brazos. Imagínate, esa muralla que esconde tus sentimientos de hace unos años, fuera destruida de nuevo. No tengo ganas de leer libros ¡imagínate! Es el extremo. Fue un bajón que nadie puede remediar.
Me incorporé cansada de estar acostada, la almohada está empapada, necesita un baño y el sol por su cuerpo. Tiré cerca de la puerta con fuerza y furia, con otras tres almohadas más, todos los días Anne entra y arregla mi habitación, no pregunta porque ya sabe que no hablaré. No he hablado con nadie durante tres días.
No estoy en un buen momento.
Mark intenta entrar en mi habitación, pero no lo logra. En este punto es muy respetuoso, es lo que amo de él. Pero en este momento no soporto ver a nadie. Me siento traicionada, me diento destrozada, me siento rota. Sin ninguna salida.
Me quedé con la mirada en los libros que tenía en la repisa que quedaban enfrente mío. Aquellos diez libros que leí con Mark. En todo lo que dirijo mi mirada, me recuerda a Mark.
Necesito de su abrazo.
Necesito de su cariño.
Necesito de su sonrisa.
Le necesito a mi madre.
Pero, no puedo.
Tres toques en la puerta me sobresaltaron, produciendo que mirara hacia ella. Es la tercera vez que viene. En estos tres días, solo ha venido tres veces, creo que es una visita por día.
— Sabrina— dice con una sonrisa—. ¿Cómo estás?
Y claramente muero de alegría.
— Puedo estar mejor— respondí seco.
— ¿Necesitas algo? — pregunta sentándose al lado mío. Miro derecho, evito el hecho que esté a mi lado. Negué con la cabeza—. Sabrina— me llamó—. No te enojes con Mark, él no te quería ocultar esto, no fue nuestro plan hacer esto. Él se siente destrozado, la última vez que estuvo así fue...
La miré.
— Él, estos tres días estaba detrás de la puerta— miré hacia ella, pero no veía su sombra—. Fue a bañarse. Sabrina.
Le observé
— Él no quería hacerte daño.
— No solo él no hizo.
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¡Eres Un Estúpido Príncipe! © [EUEP1]
Teen FictionElla es una chica muy divertida, sincera (solo porque cuando miente estornuda), buena onda. Ella deberá mudarse de país temporalmente, por motivos de perdida. Él, desde el punto de vista de Sabrina, es engreído, inexpresivo. No demuestra sus sentimi...