— Lamento llamarte a estas horas pero estoy desesperada.
La voz de la madre de Jungkook se cortaba con facilidad debido al llanto. Mi estómago se retorció y una pinchazo de dolor se hizo presente en mi pecho. Tenía miedo.
— ¿Todo bien, señora HaNeul?
Tenía que tranquilizarme o de lo contrario, debido a la situación y a qué no tenía ni la menor idea de qué estaba sucediendo, terminaría llorando en cualquier segundo.
— Es Jungkook..-
Mi corazón tembló. Demonios, no.
— No sabemos dónde está.
Miré a Jimin con dificultad, sentía como todo comenzaba a dar vueltas. Ahora sabía el por qué de su visita tan inesperada.
— Salió de casa hace unas horas y no ha regresado, pensé que tal vez estaría contigo pero creo que me equivoqué.
— Perdone señora HaNeul pero no entiendo, ¿Por qué Jungkook se iría sin decirle nada a usted? — me sostuve de la pared, o de donde pude.
— Escuchó una conversación que no tenía que haber escuchado... ¡Por Dios soy una tonta!
El llanto de la señora Jeon se intensificaba cada vez más causando que mis nervios se pusieran de punta.
— ¿No le dijo si iría a la casa de algún amigo? No lo sé, algún vecino..
— No, Jungkook es muy apático para hacer amistades — dijo. — Mi hijo MiSuk, no tengo idea de donde esté o si esta bien.
— Señora Jeon, tiene que tranquilizarse.
Ni si quiera yo podía tranquilizarme. Que gran consejo, tonta.
— Jimin y yo saldremos a buscarlo, él estará bien de seguro solo salió a tomar un poco de aire.
— ¿Jimin está contigo?
— Así es.
Intentaba que mis palabras de alguna manera tranquilizaran a la madre de Jungkook y de paso hicieran algo de efecto en mi.
— Gracias MiSuk, no sabes cuánto te lo agradezco.
Cuando la llamada terminó, ni siquiera lo pensé dos veces. Lo próximo que sabía era que Jimin manejaba mientras yo intentaba encontrar una respuesta sobre dónde carajos podía estar Jungkook. Pero por azares del destino mi mente estaba en blanco, la preocupación era mayor y me dificultaba pensar con claridad.
— ¿Tienes idea de dónde pueda estar? — una voz mucho más profunda me hizo girar hacia los asientos traseros del auto.
Miré a Jimin en busca de una respuesta.
— Oh, lo siento — sonrió inocente. — Él es Taehyung — el chico recién mencionado levantó su mano en forma de saludo. — Taehyung ella es...
— MiSuk, lo sé — su sonrisa no se hizo esperar.
Taehyung.. ¿Tae? Claro, la "novia de Jungkook".
— Un gusto — contesté devolviéndole el gesto. — ¿Tienen idea de dónde pueda estar?
— No — suspiró el castaño. — No entiendo que pasó, en la tarde estaba bien... Bueno, algo enojado pero en él es normal.
— ¿Estaban con él? — pregunté. Ambos chicos asintieron.
Dios, extrañaba tanto a la bestia.
— Tal vez está en algún centro comercial — Jimin no despegaba la vista del camino. Calló unos minutos y siguió hablando. — Olvídenlo, a Jungkook nunca le han gustado esos lugares.
— Jungkook es un chico solitario — era turno de mirar a Tae. — Sea lo que sea que lo haya hecho reaccionar así tuvo que ser algo fuerte como para hacerlo alejarse de todos sin decir nada.
Imaginarme a Jungkook solo por las calles en algún lugar oscuro me asustaba más. Sentía como mi estómago se revolvía debido a todo lo que estaba sucediendo, solo quería encontrarlo y golpearlo por ser tan idiota e impulsivo.
Recargué mi cabeza contra la ventanilla del auto. Miraba a las personas que caminaban por estas con la esperanza de ver el rostro de Jungkook, las luces de las farolas me mareaban y los árboles le daban un toque gótico al gran parque por el que pasáb..
"Suelo refugiarme en el parque cuando siento que ya no puedo más.."
— El parque — susurré.
En ese momento, tal como si se tratara de un flashazo, las palabras de la bestia vinieron a mi cabeza.
— ¿Qué sucede, MiSuk? — preguntó el antes mencionado, Taehyung.
Ambos chicos me miraron confundidos mientras yo intentaba que toda la información que corría por mi cabeza se aclarara.
— ¡EL PARQUE! — alcé la voz. — Jungkook dijo que suele refugiarse en el parque.
El rostro de Jimin y Taehyung se iluminó por unos segundos, pero esa felicidad solo fue momentánea.
— Bien, ahora tenemos una idea de donde pueda estar. Es solo que...-
— ¿Qué? — una pizca de alegría se había apoderado de mi pecho. Jimin rascó su cabeza chasqueando su lengua.
— ¿Te dijo algún parque en específico?
Y ahí, toda esa felicidad que había sentido minutos antes, se fue directo al caño. Negué lentamente. ¡Demonios, Jeon!
— Hey vamos, quiten esas caras – el chico castaño habló. — Sólo tenemos que pensar un poco más y daremos con Jungkook.
— Tae, ¿sabes cuántos parques hay en Seúl? — el chico iba a hablar pero Jimin lo interrumpió. — ¡Demasiados! — exclamó.
— Él tiene razón, Jimin — hablé un poco más calmada. — No lo sé, tal vez Jungkook tenga recuerdos de cuando era pequeño en un parque en específico.
Los tres nos quedamos en silencio. Tanto Jimin como Taehyung se mostraban pensativos. Cada segundo que pasaba se sentía como una eternidad lejos de Jeon.
— ¿Cuál es el nombre de la madre de Jungkook? — dije mordiendo un poco mi uña. Tenía una corazonada.
— HaNeul — mi corazón latió con más fuerza al escuchar la voz de Tae. — ¿Qué tiene que ver la madre de Jungkook en todo esto?
Jimin pareció captarlo al instante como yo, su sonrisa se ensanchó a tal grado que sus ojos se cerraron por completo y aplaudió efusivamente sobre el volante.
— Oh, esperen..-
— El parque HaNeul — dije, sintiendo de nuevo esa alegría inundarme.

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BLIND -Jeon Jungkook.
FanfictionElla era brillante. Él era ciego. ¿Confías en mí? Ciegamente.