Semana 2 parte 3

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POV CRISTIAN

-nena, no puedes ponerte así cada vez que alguien te da alguna noticia mala. No eres la mujer fuerte y dulce que conocí en la isla- le digo a Ana que está en la cama llorando como una niña. Le acabo de decir algo que la puede molestar. Prefiero que regaño, me arañe o me coma a besos. Cualquiera de las opciones me gusta.

-es que... no puedo creer que el gobierno nos esté haciendo esto. Hemos demostrado que con los pocos recursos que tenemos, podemos lograr muchas cosas. Pero, aun así, van y nos quitan lo poco que nos dan. ¿Dónde vamos a encontrar la posibilidad de encontrar un benefactor y sacar al gobierno de ese lugar? Lo único que está haciendo es que la gente pierda la confianza- dice. Toma un suspiro profundo y luego hace un gran puchero.

-bebé, saber que vamos a trabajar juntos para que tu escuela sea la mejor. Un no he tenido tiempo de buscar un lugar adecuado para eso. Más cuando quiero construir un internado- digo. Se limpia las lágrimas y me mira.

-¿Estás seguro lo del internado?-

-si. Mira, estuve pensando bien las cosas. Me has dicho que esos niños están dañados y estar en una casa hogar, es complicado para los niños. Ellos siempre necesitan cariño y estar constantemente vigilados. Una escuela lo único que hará, es enseñarle cosas, pero, después tienen que volver a la casa hogar. Eso, corta la vida de cualquier niño. Eso me llevo a pensar, que lo mejor que podemos hacer es, que ellos estén en un lugar estable, donde se puedan rehabilitar y logren tener una familia en un futuro. Tú le darás armas para defenderse, como lo es la educación y yo, le daré los recursos para obtener esa estabilidad y educación- digo. Ella me mira y tiene esa sonrisa que me robado el corazón desde que la conozco.

-tu que decías que no tenías corazón y con esto, me demuestra que tienes un corazón más grande de lo que quieres aparentar- se levanta de la cama y queda a unos centímetros de mi cara -no deberías ocultarlo. Es demasiado hermoso como para que lo guardes para ti mismo- dice. Con su dedo índice dibuja mi labio inferior. Con cuidado, muerdo su dedo y ella me sonríe.

-es contigo que sale esa parte de mi corazón. Me gusta verte feliz y que no tengas preocupaciones. Además, habíamos de esto en la isla, pero, al parecer, las cosas se nos adelantaron un poco. Eso, y el hecho de que es por una causa sin lucro, me ayudan a tener una baja en la cantidad de impuesto que pago mensualmente. Además, cuando el bebé llegue, también me ayudara con eso- digo y ella frunce el ceño.

-parece que todo lo que te ha pasado en este último tiempo, te está haciendo muy feliz- dice y ahora soy quien la comienzo a besar. Mis manos inmediatamente se van a su cadera y le comienzo atraer hacia mí. Me gusta tenerla cerca, mas, después de una jornada laboral estresante.

-si. Más teniendo la oportunidad de dormir contigo todas las noches. Además, tengo que hablar contigo de algo. Bueno, en realidad son dos cosas- digo y ella se separa. Me frunce el ceño. Dándome un último beso, se separa de mí.

-¿Qué está pasando?- suspiro. Sé que No le va a gustar nada de lo que le voy a decir.

-la próxima semana, mis abogados, Leila y sus abogados y yo participaremos en una relación para dar por finiquitado el tema del divorcio. No va a ser una negociación fácil, más porque Leila quiere la mitad de todas mis cosas. Yo no quiero darle más de lo que ya ha recibido por vender nuestra supuesta historia. Sé que no quieres tenerla cerca, más aun, que estas esperando a nuestro pequeño y hare todo lo posible para que ella no llegue a ti- dice y se sienta.

-sabía que ese día llegaría. Solo que no me gusta la idea de que estés cerca de ella. Tenerla cerca, me hace pensar que recordaras tu pasado y no quiero que sigas sufriendo por eso. Más, cuando nos tienes a nosotros- dice y sonrió.

60 SemanasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora