Semana 38

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POV ANASTASIA

Es temprano en la mañana y los tres estamos en la cama disfrutando de un momento de tranquilidad familiar. Parece raro, pero Cristian está llevando sólo su pantalón de pijama y no ha tenido intención de levantarse para ir a trabajar, siendo que me dijo ayer que tenía una reunión muy importante, cerca de las diez de la mañana.

-¿No tienes que trabajar? Me dijiste que tenías una reunión muy importante que no podías faltar a ella y según el reloj solamente falta media hora y en que salgas de la casa y que llegues a la oficina será más de media hora- digo y el levanta una ceja como para decirme que lo que acabo de decir lo acaba de asombrar.

-se lo que dije anoche, pero llame Andrea para cancelar la reunión. También le pedí a Andrea que re-agendara todas mis reuniones y todas mis citas durante las próximas cuatro semanas y además le tuve que decir que modificara mi horario dos semanas más porque nos vamos de luna de miel. Tengo que estar presente en la vida de mi familia y más si tenemos que ver el tema de la boda. Tanto mi hermana como mi madre vendrán esta tarde con ciertos folletos para ver el arreglo de las mesas y empezar a ver lo que se necesitamos para realizar la boda. No sé si te guste la idea, pero pensaba que podríamos realizar la boda en la casa de mis padres- dice y asiente con la cabeza. Es como si se estuviera confirmando la información que me está entregando.

-pensé que a los hombres no les gusta ver el tema de las bodas. Siempre leído que no les importan los detalles, solamente tienen llegar al altar. No me molesta la idea de que la boda se realiza en la casa de tus padres, es un lugar muy bello y muy amplio y tu madre cuida muy bien el jardín y siempre es de color verde. Es como casarse en la naturaleza y eso es lo que me gusta- digo mientras me levanto a buscar a Teddy que está por despertar para comer.

-es cierto que le sacamos el quite, pero es mi boda. Además tienes una complicación al momento de la boda. Nuestro hijo necesita de ti y eso puede significar que muchas de las cosas no podrás hacerlas en el momento y tendrás que pedir ayuda y quien mejor que yo para ayudarte- dice y entrecerró los ojos.

-no veras el vestido de bodas. Ese es un secreto hasta el mismo día. Así que no sacas nada en ayudarme en ese aspecto porque no necesito tu ayuda y más si quiero que sea una sorpresa. Ahora, hablando seriamente, si nos vamos a ir de luna de miel tenemos que llevar a Teddy con nosotros. Para esa fecha tendrá solamente 6 semanas de nacido y aunque en la congeladora hay una buena cantidad de leche materna congelada, consideró que el apego es algo importante para el bebé. Es muy pequeño y no podría separarme de él- digo y algo pasa por mi cabeza, pero espero que él también se haya dado cuenta la información.

-no había pensado en ese tema y tampoco puedo estar lejos del bebé tanto tiempo. Sólo que tenemos un leve problema. Cuando nos casemos cumples las semanas de cuarentena y tienes que saber que no te dejare tranquila en toda la noche y eso me complica porque significa que no vas a estar callada mientras tenemos relaciones y tenemos un bebé pequeño durmiendo a unos cuantos metros de nosotros- dice y sabía que la fecha de la boda tenía que ver con la fecha de caducidad. Supongo que no se le escapa nada de lo que está pasando a nuestro alrededor y mucho menos si se trata de sexo.

-pues me tendrás que ayudar a que si el bebé llora por algún motivo, se le consuele como se debe. Él no tiene que saber porque su padre está enojado o porque está frustrado al acercarse a él. Esos días vas a tener que controlar tus emociones y más porque no sé a dónde me estás llevando, ya que no me has querido decir- llegó hasta la pequeña cómoda donde están todas las cosas del bebé y buscó lo necesario para mudarlo. Ya tiene tres semanas con nosotros y poco a poco nos vamos acostumbrando a su llanto. Al ciertas diferencias en su tono pero, Cristian aun no los diferencia del todo.

60 SemanasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora