43º Dormir.

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(T/N):

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(T/N):

— ¿Y ya le has visto el pene?.— Gritó Lisa eufórica.

— ¡No digas esas cosas!.— Reí mientras me acomodaba mejor entre las sabanas.

— Yo digo que le des una oportunidad, ¿te imaginas la cantidad de cosas que podría enseñarte un hombre de su edad?.—

— No lose, debo admitir que Tae Hyung llama mi atención demasiado pero no puedo tener una relación con el.—

— ¿Porque no?.— Bufó.

— ¡Porque es mucho más grande que yo! Dudo que mi madre llegue a aprobar eso.—

— oh vamos, debes probar cosas nuevas ¿A donde te llevó anoche?.—

— Al cine, es la tercera vez que salimos.— Suspiré.

— ¿Y se besaron?.— Gritó emocionada.

— Por supuesto que no, Tae Hyung no ha intentado ni siquiera darme un abrazo.—

— ¿Entonces que hicieron?.—

— Charlar y ver la película, eso es lo que la gente normal hace cuando va al cine, Lisa.— Rodeé mis ojos.

— ¿Y como es contigo? Es decir, ¿actúa como un hombre mayor o quiere quedar bien y usa palabras y frases como si fuera adolescente?.—

— En realidad no.— Reí. — Creo que Tae Hyung sabe como tratar a una mujer, es atento y escucha detenidamente todo lo que le cuento.—

— Te mereces a una persona así y no a un idiota como Jungkook.— Sinceró.

Ese idiota es la principal razón por la que no puedo conocer a otra persona, aun sigue doliendo.

— Te llamaré mañana, ya tengo un poco de sueño.—

— Bien estaré esperando, te quiero ___.—

— También yo, descansa.— Finalicé la llamada.

Me acomodé de una mejor manera en la cama y me puse a pensar en las intenciones que Tae Hyung podría tener conmigo.

Una de las muchas cosas que perdí en mi relación con Jungkook fue la confianza, ahora sentía miedo de intentar algo y que esta persona me mintiera y engañara.

¿Que tal si Tae Hyung solo quería acostarse conmigo? ¿O que tal si solo estaba buscando alguna chica con la cual pasar el rato?

No podía bajar la guardia y comenzar a hacerme ilusiones con el. La inseguridad era algo que me carcomía todas las noches antes de ir a dormir.

La alarma sonó y mi rutina para irme al trabajo volvió a comenzar una ves más.

Arreglarme, desayunar, tomar el autobús, llegar al trabajo, reír con los chicos y después que Xiumin venga a llamarnos la atención por el alto volumen de risas. Podía acostumbrarme fácilmente a esto.

Secretos | Jungkook. En edición. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora