"Algo es seguro, sea lo que sea lo que intentamos esconder nunca estaremos preparados para cuando llegue el momento en que la verdad se desnude. Los secretos son como las desgracias pues nunca vienen solos, se van acumulando hasta que se apoderan de...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
(T/N): Lunes por la mañana.
— Ya despierta, perezosa.— Susurró Jungkook dando besos en mis mejillas.
Así hayan sido solo un par de noches en las que se ha quedado conmigo a dormir nos ha ayudado bastante para recuperar el tiempo perdido y ponernos al corriente con lo que ha pasado en nuestras vidas luego de que termináramos.
— ¿Podemos faltar al instituto?.— Pregunté con la esperanza de que asintiera.
— Es el primer día y no podemos faltar ¿puedo tomar una ducha en tu baño?.— Se levantó de inmediato de la cama.
— Claro, yo iré a preparar algo de desayunar.— Repetí su acción.
— Nos hemos acabado todo lo de la nevera, creo que sería más conveniente que pasáramos a la cafetería antes de entrar a clases.—
— De acuerdo, entonces yo usaré el baño de mi madre.—
— Te amo cariño, no demores mucho.— Se acercó a besar mi frente.
Estaba muy intrigada por la reacción de mis amigos, no había comentado nada a nadie hasta ese momento y por alguna extraña razón no quería que se sintieran decepcionados de mi, hoy en día hay muchas chicas ilusas que vuelven con sus parejas luego de que las engañaran, creo que era mi caso solo que algo dentro de mi me decía que Jungkook no me volvería a fallar, al final de todo se sentía bien que gracias ami haya decidido cambiar su estilo de vida y ser mejor persona.
Jungkook y yo no tardamos mucho en estar listos y emprendimos nuestro viaje a una cafetería cercana al instituto, me pidió que fuera a apartar una mesa ya que muchos estudiantes van a tomar el desayuno ahí y podríamos quedarnos sin asientos.
— Volví.— Se sentó frente ami y puso un par de cafés en la mesa.
— Te extrañé.—
— Yo más, ordené hot cakes y no deben de tardar en traerlos.—
— Bien.—
— ¿Que tienes? Te ves nerviosa.— Me miró.
— Lo estoy un poco, por Mark, Lisa ¿me entiendes, no?.—
— Si, no sabes como me gustaría arreglar las cosas con Mark, solo los tenía ati, a el y a las chicas.— Suspiró.
— ¿Las chicas?.— Pregunté confundida.
— Si, Joy y Yeri ¿a quien más?.— Rodeó los ojos.
— Oh, claro.— Me encogí de brazos.
— No pienses que me gustan, solo las quiero como amigas sería ilógico que....—
— Tranquilo, entiendo lo que quisiste decir.— Lo interrumpí entre risas.
— Espero Mark me escuche, estaría dispuesto a explicarle lo de Ji Yong.—
