Capítulo N° 15

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La ceremonia al fin había terminado, fue la peor tortura que pudo vivir Midoriya y tuvo que soportarla con una sonrisa fingida en su rostro, mirar hacia otro lado con disimulo en el "puede besar a la novia" y salir luego de los novios, viendo como sus manos estaban unidas.

Ahora se encontraba sentado en una mesa cercana a la de los novios y sus familias, con Shinsō, Hatsume, Hagakure y otras amigas de la novia, "disfrutando" de la cena y respondiendo con cortesía a las preguntas que en la mesa le hacían por su labor, pero sin hablar más de lo necesario, si por él fuera estaría hecho una bolita bajo las sábanas de su cama.

Luego de un discurso de Enji Todoroki, siendo políticamente correcto y con una amabilidad que el pecoso sabía fingía, los recién casados se pusieron de pie para comenzar el vals, un cuarteto de cuerdas tocaba una hermosa melodía mientras la peli negra se movía con gracia con una enorme sonrisa en su rostro y el mitad peli rojo tenía una sutil sonrisa que desaparecía en cuanto no veía a algún fotógrafo.

Cuando el baile hubo finalizado tuvo la intención de huir al baño, pero la periodista lo interceptó y lo arrastró al bar donde estaba Hitoshi esperando.

- ¿Por qué traes a Midoriya arrastrando? – preguntó el de pelo lavanda.

- Porque quería huir a sumirse en su depresión – respondió con simpleza la muchacha mientras con una seña pidió tres shots de tequila al barman.

- ¿De... de qué depresión hablas Mei? – preguntó con nerviosismo el pecoso.

El barman dejó los pequeños vasos con tequila, un platillo con trozos de limón y otro con sal frente a ellos, retirándose inmediatamente, ante lo cual la peli rosa tomó el suyo y lo levantó en señal de querer hacer un brindis.

- De la que te haremos olvidar ahora – respondió con una sonrisa, no era tan indiscreta como para hablar de las conclusiones que había sacado en un salón lleno de buitres que podrían recoger esa información para arruinar a Midoriya – ¡Esta noche será el comienzo de un nuevo tú! – indicó la chica.

- ¿De qué hablas Mei? – preguntó intrigado el fotógrafo y Midoriya solo se asombró al ver como la muchacha bebió el shot de un solo trago, sin hacer alguna mueca ni necesitar el trozo de limón ni la sal.

- De que soy una gran amiga que no está siendo apoyada por ustedes – dijo tomando los otros dos vasos y entregándoselos a los chicos para que bebieran, mientras le pedía otra ronda al barman y los acompañaba - ¡Salud!

Luego de unas cuantas rondas de tequila, Izuku se comenzó a sentir más feliz, las discusiones que mantenían sus nuevos amigos lo divertían y poco a poco la tristeza se iba difuminando siendo reemplazada con indiferencia, si estaba obligado a estar en ese matrimonio se aseguraría de disfrutarlo.

Las consecuencias de tomar una rosa bicolor (TodoDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora