- ¿Piensas que soy un imbécil, cierto? – desvió la mirada Midoriya con notable tristeza – Eso piensan Ochako y Kacchan, supongo que tienen razón – sintió las tibias manos del contrario en su rostro, las cuales lo obligaron a girar la cabeza en su dirección y mirarlo a los ojos, la cercanía lo abrumó un poco y no pudo evitar sonrojarse.
- No creo que seas imbécil – dijo Shinsō mirándolo directamente a los ojos – Solo creo que eres una persona que ama tan sinceramente que es capaz de desmoronarse con tal de ver completos a los que quiere – secó dos lágrimas más antes que el policía lo abrazara fuertemente y rompiera en llanto, mientras él solo le repetía que sacara todo lo malo que sentía y acariciaba su espalda.
Cuando el llanto finalizó, le preparó otro té y lo condujo a la pieza de invitados, le prestó unos pantalones cortos y una camiseta negra para que pudiera dormir más cómodo. Una vez que Midoriya estuvo acostado comenzó a beber la infusión mientras controlaba su respiración poco a poco, en tanto que el peli lavanda se sentó a los pies de la cama observándolo.
- Izuku, no te diré qué es lo que debes hacer, porque solo tú puedes tomar esa decisión, pero si quiero que consideres lo siguiente – suspiró – Jamás podrás tener una relación sana si no te quieres a ti mismo primero, puede que suene muy cliché, pero es real y tampoco puedes pretender ser feliz dando a los otros los trozos que les falta para estar completos a costa de tu estabilidad – se rascó la nuca nervioso, jamás había dado un discurso como ese, pero le había salido del corazón, le dolía ver tan mal al policía.
- Muchas gracias Hitoshi – le sonrió luego de dejar la taza en el velador – Gracias por no juzgarme y tenerme paciencia. Prometo que pensaré todo lo que me dijiste, no quiero que tu desvelo sea en vano – habló con determinación, la cual esperaba siguiera ahí a la mañana siguiente.
- No te preocupes, estaré dispuesto a desvelarme cada vez que lo necesites – dijo luego de ponerse de pie, mientras caminaba hasta la puerta – Buenas noches Izuku – apagó la luz.
- Descansa Hitoshi – respondió el pecoso antes que cerrara la puerta. Suspiró y se acomodó en la cama, bueno, lo intentó, pero lo vivido aquel día, las palabras de sus amigos y sobre todo las de Shinsō no lo dejaban conciliar el sueño.
Luego de horas de dar vueltas en la cama como un vil gusano llegó a una conclusión, no podía seguir sin aclarar las cosas con Shōto, le temía como al infierno a aquella conversación que se debían, pero ahora que se sentía respaldado, empoderado y que la confianza comenzaba a germinar en su interior era el momento adecuado para hacerlo.
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Las consecuencias de tomar una rosa bicolor (TodoDeku)
FanfictionShōto Todoroki e Izuku Midoriya son ex compañeros de la prestigiosa preparatoria UA. Actualmente, con 25 años, los muchachos mantienen una relación oculta que lleva más de dos años, hasta que se divulga por la prensa que el hijo menor de los Todoro...