Capítulo N° 5

60 9 8
                                    


Izuku llegó a la comisaría con los ojos rojos, por lo que no levantó la cabeza y raudamente se dirigió a los baños para lavarse el rostro y salir a patrullar, agradecía tener que hacerlo, pues podría mantenerse ocupado y alejado de los pensamientos que lo deprimían cada vez más.

- ¡¿Dónde está el imbécil de Fumikage?! – escuchó un grito, en ese momento se dio cuenta que tenía que salir a cumplir con su labor.

- Cambió turno para la tarde... - respondió Mina sin inmutarse por el grito de su compañero de trabajo, iba a explicar sobre ello, pero no fue necesario cuando el peliverde se apareció por el mesón principal.

- Yo lo reemplazaré – dijo el muchacho intentando mantenerse calmado.

- ¡Lo que me faltaba, tener que patrullar con el estúpido de Deku! – bufó el chico gritón de cabellos rubios cenizos y mal carácter.

- Hoy no Katsuki – dijo el pecoso mientras se dirigía a la patrulla – Hoy conduciré yo – señaló sin más.

Aquella actitud tomó por sorpresa a Katsuki, conocía a Midoriya desde que eran unos niños, era el hijo de su nana y al tener la misma edad siempre fueron compañeros de curso, por lo que inmediatamente se dio cuenta que algo malo pasaba. El chico usualmente risueño y muy paciente, no lo había llamado Kacchan y tampoco le había dirigido su usual sonrisa, por lo que guiado por la curiosidad y en el fondo un poco de preocupación por su amigo interrogó a la peli rosa - ¿Qué le pasa a éste? – preguntó en voz baja.

- No lo sé, pero estuvo muy extraño cuando lo vino a buscar Todoroki y volvió peor – señaló la chica con voz baja – Así que, no seas tan tú hoy – dijo con una sonrisa divertida mientras apretaba el hombro del muchacho, tentando a su suerte, pero el chico solo bufó y se fue a la patrulla.

La primera parada era la plaza de la ciudad, frente a los bancos, se acostumbraba apostar una patrulla en horarios estratégicos en ese lugar para disuadir con la presencia de efectivos policiales posibles robos, asaltos o alunizajes, sin embargo, no siempre daba efecto. Estuvieron unos diez minutos en silencio, hasta que Katsuki Bakugō no soportó más.

- ¿Qué mierda te pasa? – dijo con la impaciencia que lo caracteriza.

- ¿Qué tendría que pasarme? – respondió el pecoso sin despegar su vista del frontis del banco que atendía durante las tardes para ciertos trámites.

­- No me respondas con otra pregunta – dijo apretando los dientes, controlando su mal humor.

- ¿Qué es lo que quieres saber? ¿Que mi vida amorosa es una mierda? ¿Eso? – respondió volteando a ver a su compañero y amigo con los ojos llorosos.

- ¡¿Cómo mierda voy a saber que tu vida amorosa es una mierda si ni siquiera sabía que tenías una?! – le gritó de vuelta, odiaba ver a su amigo llorar, lo cual hacía muy seguido, pero esta vez lo veía roto y tampoco le agradaba ser el centro de sus ataques cuando solo estaba preocupado por él.

Izuku se sintió inmediatamente mal por responder de esa manera a su compañero, sabía que estaba preocupado y lo mucho que le costaba demostrarlo, pero se sentía tan mal que no pudo evitarlo. Se fregó los ojos y tomó tanto aire como pudo para luego soltarlo y dejar de derramar lágrimas.

- Lo siento Kacchan, me desquité contigo, pero es que ya no puedo más... - se detuvo un momento y decidió que era hora de contarle a su amigo la verdad, bueno, solo parte de ella, apretó el manubrio con fuerza y apoyó su cabeza en el mismo – Soy homosexual – un silencio invadió la patrulla y luego de eso una risa irónica de parte del peliverde, iba a soltar un comentario mordaz, pero la tosca voz del rubio lo detuvo.

- ¿Y eso qué? – Izukulevantó la cabeza con sorpresa ­– No mepuede importar menos lo que hagas en la cama con quien sea – dijo mirandopor la ventana, pero repentinamente volteó a ver a esos ojos verdes y llorosos– Sin embargo, dudo que eso sea lo que tetenga así y dudo que quieras decírmelo, así que resuelve lo que tengas queresolver y deja de llorar por todo – a pesar de lo tosco del discurso de suamigo, esas palabras hicieron que Midoriya se sintiera un poco mejor – Ahora vamos a ese maldito banco, hay trespersonas con apariencia sospecha a una cuadra – no espero la reacción de sucompañero y se bajó de la patrulla, el pecoso sonrió y lo siguió.    

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>> <<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<

Ya que no estoy haciendo nada en la oficina me pregunté: ¿Por qué no subo un cap hoy? 

Y voilà.

Espero que lo disfruten ^_^

Las consecuencias de tomar una rosa bicolor (TodoDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora