Capítulo N° 82

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Durante el último mes Shōto había visto como la luz de su novio se iba apagando más y más, ya no le contaba con ansias que le había tocado patrullar, más bien era un comentario al paso acompañado de una mueca que ocultaba todos los insultos que había recibido de parte de las personas a las que protegía día con día.

Odiaba no poder ver el brillo en los ojos esmeralda que tanto amaba, razón por la cual estaba decidido a terminar con los rumores que se habían propagado gracias a su padre y Momo. Sin embargo, no había querido comentarle nada a Izuku sobre dichos planes e increíblemente los únicos que sabían de ellos eran Bakugō y Shinsō.

- Me hicieron llegar un audio – dijo Hitoshi en cuanto ingreso al living del bicolor.

- Espero que sea algo bueno, como para hacernos esperar tanto – bufó Katsuki, malhumorado como casi siempre.

Ninguno hizo ningún comentario al respecto hasta que el peli lavanda reprodujo el audio en su celular. Resultaba ser la conversación que Romero había mantenido con Enji en el callejón a las afueras de la ciudad.

- ¿Quién te envió eso? – preguntó con voz profunda el dueño de casa.

- Se supone que no deberías saberlo – indica Hitoshi para luego soltar un suspiro en señal de rendición – Fue Tōgata, encontró esto en un dispositivo de grabación de la policía que Fujimi botó en la vía pública – explicó ante la mirada hostil que sus dos interlocutores le dirigían.

- Ese mal nacido de Romero, realmente es un estúpido – el policía rubio soltó una carcajada llena de rencor – Hizo todo esto con la ayuda de tu maldito padre y ahora se hunde solo – dijo mientras se ponía de pie y rellenaba su vaso con el licor que se encontraba en la mesa de la esquina de la sala.

- Esto confirma que Enji está involucrado – dijo Todoroki con la mirada tribulada.

- Solo a nosotros, si lo filtramos solo hundirá más a ese policía y a lo sumo generará dudas respecto a tu padre – explicó el fotógrafo.

- Con eso me basta y me sobra – dijo el bicolor – Dile a Tōgata que lo utilice en su artículo, después de su publicación será el momento perfecto para actuar – expresó con decisión.

- ¿Cuánto más piensas esperar? – preguntó con el ceño fruncido el platinado.

- Hasta la audiencia preparatoria, ni un solo día más – dijo Shōto.

- Bien – el chico ojeroso soltó el aire de sus pulmones para luego ponerse de pie – me iré a convencer a Mirio de publicar su artículo ese mismo día – se peinó el cabello revuelto con una mano antes de girarse para salir – Recen para que esté con su novio en casa, sino me tirará por una ventana por pedirle que haga todo en dos semanas – dice antes de salir de la habitación.

- Ni un día más – suelta Bakugō entre dientes mientras apunta al novio de su amigo de la infancia con su dedo índice, para luego beberse el vaso de golpe y salir tras el fotógrafo.

Las consecuencias de tomar una rosa bicolor (TodoDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora