Capítulo N° 64

17 2 2
                                    


Enji estaba sorprendido, jamás se habría imaginado que ese bajito muchacho que jugaba a ser justiciero fuera capaz de hablarle sin bajar la vista ni tartamudear, pero más allá de su sorpresa, estaba furioso ¿La razón? Con aquella pregunta tan "inocentona" a simple vista, había logrado poner en jaque el plan que había fraguado para acabar con el tonto enamoramiento de su hijo.

Era cierto que él había mandado a uno de sus hombres a seguir y fotografiar al muchacho, lo había tenido vigilado y por bastante tiempo no estuvo en contacto con Shōto, pero eso había cambiado hace poco.

Su hijo estaba encaprichado con el policía, pero estaba seguro que sería mayor su miedo a ser expuesto como homosexual y perder todo por lo que había trabajado.

Con esa idea en mente, había logrado que en un programa de televisión se exhibieran fotografías de Midoriya con su amiga Uraraka, pero no sin antes hablar en genérico sobre su noviazgo para asustar a su hijo con la posibilidad de ser expuesto. Luego, lo había citado a almorzar, en donde le convencería que lo mejor era terminar con esa relación, que en cualquier momento la prensa descubriría que estaban juntos y serían la comidilla del momento, afectando sus trabajos y sus vidas, que lo mejor para su futuro era asentarse con una linda chica de buena familia y formar la suya propia, que era hora de madurar.

Sin embargo, la presencia de Midoriya había cambiado todo y más con esa pregunta, su hijo no era tan tonto como para no darse cuenta que él estaba tras esa treta de las fotografías, por lo que no tenía más remedio que desecharla, pues su plan inicial jamás había sido exponer a su hijo como un desviado, era un Todoroki después de todo, estaba hecho para cosas grandes, no para ser apuntado.

Estaba en su despacho con un vaso de whisky entre sus manos pese a ser las cinco de la tarde cuando uno de sus hombres le indicó que un policía había llamado pidiendo hablar con él, decía llamarse Romero Fujimi y que tenía información que solo le daría a Enji Todoroki.

- ¿Dijo algo más? – preguntó el peli rojo cuando su empleado finalizó.

- No señor, solo insistía en que era información importante que usted debía conocer – respondió.

Luego de pensarlo por un momento sacó una pequeña libreta que guardaba bajo llave en uno de los cajones de su escritorio, la hojeó y leyó atentamente sus pendientes de los próximos días – Investígalo y cítalo para dentro de cuatro días más, dile que vaya a la oficina que tenemos a las afueras de la ciudad y que vaya de civil – cuando terminó de dar las indicaciones el hombre asintió y se retiró del despacho.

Las consecuencias de tomar una rosa bicolor (TodoDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora