Las consecuencias de tomar una rosa bicolor (TodoDeku)

Capítulo N° 21

- Debe ser muy urgente como para que estés aquí en tu primer día de casado – señaló Aizawa mientras se servía un café.

- Algo así – se limitó a responder el menor, aún de pie.

- Toma asiento joven Todoroki – dijo Yagi – No sé cuando llegue el joven Midoriya, para serte sincero, no sabía que estaba en camino – se cruzó de brazos mientras miraba al pelinegro tomar asiento, al igual que lo hacía el mitad albino.

- En realidad llamé a mi sobrino en la mañana para coordinar una estúpida campaña de prevención de delitos con el niño justiciero y me dijo que estaba en su casa, así que los hice venir – tomó un sorbo de su café mirando de reojo al muchacho que no pudo ocultar su reacción de asombro ante la información dada.

- ¿Su sobrino? – preguntó volviendo a su rostro inexpresivo, pero jugando con sus manos entrelazadas, apretando y soltando repetidamente, gesto que no pasó desapercibido para ninguno de los dos policías.

- Así es, el joven Shinsō es el sobrino del Coronel Aizawa – respondió Toshinori, mirando fijamente al joven que hizo sonar sus dedos de la mano derecha.

- Hitoshi apúrate, el Coronel nos está esperando – resonó la voz del peliverde fuera de la oficina, lo cual tensionó inmediatamente a Todoroki.

- No veo porque tengamos que apurarnos, tu turno no es hasta la tarde y solo le hacemos un favor a mi tirano tío con venir a esta hora – se escuchó la voz del fotógrafo con calma, lo cual provocó el enojo del peli negro pero se contuvo, era más importante averiguar qué estaba pasando, luego se vengaría de su sobrino.

Un golpe en la puerta seguido de un adelante del rubio llevó a que la misma se abriera y dejara ver a un sonriente pecoso entrar, sonrisa que se desvaneció en cuanto vio a su "amigo" sentado en aquella oficina. Por reflejo, el asesor rodeó con su brazo los hombros del policía y miró de mala manera a Todoroki, quien le devolvió la misma mirada y se puso de pie.

- Bu... buenos días – tartamudeó el peliverde, el ambiente tenso era más que obvio y Aizawa no paraba de mover sus ojos analizando a los tres más jóvenes.

- Buenos días joven Midoriya – le sonrió Toshinori – Lamento que te hayamos hecho venir en tu hora libre, pero el Coronel Aizawa tenía que discutir con ustedes una nueva campaña... - no pudo terminar de explicar ya que fue interrumpido.

- ¿Y tú qué haces aquí? – habló seco el fotógrafo sin dejar de mirar al heterocromático.

- Necesito hablar con Izuku – respondió de la misma manera.

- Shōto, te llamaré cuando me desocupe, ahora tengo trabajo así que... - dijo Midoriya con evidente nerviosismo, desviando la mirada.

- Si es tan urgente como para que el joven Todoroki deje su luna de miel para venir a hablar contigo, pueden hacerlo aquí – se puso de pie el Coronel, sorprendiendo a todos.

- No es... - el pecoso fue interrumpido por la profunda voz del hijo menor de Enji.

- Se lo agradecería mucho – dijo mirando los negros ojos de Aizawa, quien luego de esto se dispuso a caminar fuera de la oficina junto con Yagi, sin embargo, Shinsō no se movió de su lugar.

Tomando al más bajo por ambos hombros lo puso frente a sí y lo miró a los ojos - ¿Estás seguro de esto? – preguntó en voz baja, mientras los dos mayores veían todo desde la puerta.

- No, pero tengo que hacerlo – respondió con una sonrisa temblorosa.

- Si necesitas cualquier cosa, solo llámame, no pienso moverme de esa puerta – recibió un asentimiento del contrario y se fue dándole una mirada amenazadora a Todoroki, quien tenía las manos cerradas en dos puños.