Exhekar Tales II: El Tesoro Ancestral & La Bruja Glotona

Capítulo 4: [Amistades en ciudad Jaskava] (3)

Parte 3

El edificio del gobernador de la ciudad Jaskava es una gran estructura de cuatro pisos, reforzada con pilares de madera y pasta de una mezcla entre huevo, barro y otras sustancias desconocidas para los trabajadores de la construcción. Los muros están pintados de un color blanco y se muestran adornados de banderas de la nación de Lugarta y algunos cuadros que muestran pinturas sobre la historia del reino. Los suelos alfombrados permiten mantener el calor en el edificio. Dentro de él, trabaja un total de ciento veinticinco personas, la mayoría repartidas entre guardias y oficiales que organizan la información de los diferentes aspectos de la ciudad, tales como los gremios de comercio, reportes de la actividad agrícola y ganadera, demandas de robo, entre otros. Existen varias habitaciones utilizadas únicamente como bodegas de documentos, los que de vez en cuando son visitadas por los agentes del gobierno. El gobernador electo, un viejo Kaevalery de setenta años, dirige a todos sus empleados para mantener la estabilidad económico-social de la ciudad. Por supuesto, este hombre no es capaz de hacer todo el trabajo solo, por lo que se le permite tener hasta tres asistentes, a los cuales delega diferentes actividades. El gobernador vive con su familia dentro de la gran estructura, siendo su habitación un cuarto en el primer piso, cercano a una de las salidas al patio de la estructura. También hay habitaciones reservadas especiales para visitas importantes, sean nobles o miembros de la realeza, pero suelen estar vacías. Un comedor se encuentra en el tercer piso, con un enorme mesón en donde cabe un total de doce personas. El gobernador no suele usar aquella estancia y prefiere comer en un restaurante cercano, siendo famoso por conversar con los locales mientras almuerza o cena, ganándose así el favor del pueblo. Sin embargo, esta es una ocasión especial, en donde el primer príncipe desea cenar con uno de los capitanes de la guardia del reino y su esposa. El gobernador quisiera dejarlos solos, pero el príncipe también lo invitó a él y su familia, por lo que ahora hay un total de ocho personas sentadas frente a un mesón, esperando la comida: el príncipe Brikyon; el capitán de la guardia y su esposa; y el gobernador, su esposa y sus tres hijos, de los cuales el menor tiene treinta años y es un oficial del reino.

—No recordaba que tu esposa fuera tan bella —comenta el heredero al trono, observando a la mujer de cabellos rojizos que se encuentra sentada a dos puestos de distancia de él. Sus ropas no son formales, pero son bastante prácticas para representar que ella es una maga guerrera que se encuentra de viaje.

—Nunca la viste —responde Eomstyll, sorbiendo una copa con agua, mostrando un rostro de enfado ante la forma en la que su amigo mira a su mujer.

—Ah, es verdad.

—Me presento, mi nombre es Sazguljend Amrasa. —Saz baja su cabeza y hace un gesto cortés a todos los presentes. La familia del gobernador saluda de vuelta.

—He oído tu nombre de parte de mis consejeros. Una historiadora excepcional. Lamento decir que la primera vez que lo escuché, pensé que eras un hombre.

El capitán de la guardia escupe ligeramente el agua que estaba bebiendo, intentando contener su risa. Su esposa se limita a cerrar los ojos y ruborizarse ligeramente por el enfado.

—Me lo han dicho seguido.

Eomstyll advierte a su amigo de la realeza que no mencione mucho aquella particularidad, ya que su esposa tiene cierto trauma con su nombre. La declaración aumenta la curiosidad del príncipe y por otro lado, el enfado de Saz, quien le da un tirón de orejas a su marido. El Kaevalery ríe cuando el príncipe le ordena que le cuente el motivo de dicho trauma.

Resulta ser que el día en el que Eomstyll y Sazguljend se iban a casar, un grupo de personas había interrumpido en la ceremonia sólo para burlarse de que el Kaevalery iba a desposar a un hombre. Matrimonios homosexuales existen en Lugarta, pero son inusuales, siendo común la existencia de personas con mente discriminatoria. En este caso, los que interrumpieron la boda era un grupo de borrachos que tenían cierto rencor hacia el novio. Sin embargo, para su sorpresa, la novia era una bella mujer. El escándalo que hicieron por el asombro fue tal, que la ceremonia tuvo que posponerse para el día siguiente. Por supuesto, Saz les dio una buena paliza a esos groseros y Eomstyll les encarceló.