Capitulo 58:

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A pasado una semana y ni Azuky ni yo hemos dicho nada sobre el beso. Parece como si nunca hubiera pasado, seguimos tratándonos como siempre...
¿se supone que deberia pasar algo diferente?... No a vuelto a tener pesadillas, pero tampoco yo me he levantado más de la cama.

No le he dicho nada a Shinohara, creo que me regañaría si se entera de que bese a Azuky solo para demostrarle que cuidare de ella y no por que me sienta enfermo.
-senpai, ¿se encuentra bien?- levante la mirada de mi cuchilla y mire a Hanbee.
-si, todo esta bien.- dije sintiéndome extraño de nuevo. ¿habré hecho mal en besarla?
-a estado muy distraído esta semana.- siguió insistiendo.
-de verdad, todo esta bien. Ahora pregúntales a los demás que si ya están listos para entrenar.
Hanbee asintió y salio de ahi, yo caminé hasta la sala de entrenamiento.

Azuky y yo estábamos sobre la cuerda floja entrenando, Hanbee y Miyuki entrenaban juntos al igual que Nakarai y Mizurou.
Azuky salto hacia atras, dando un giro y callendo en al suelo con un solo pie, esquivo una de mis cuchillas lanzándome otra en respuesta.
Corrió y tomo prestado el quinque de Hanbee, active a Jasón y comenzamos a pelear con nuestros quinques, ella giraba, esquivaba y atacaba. Mis subordinados nos dieron espació y dejaron de entrenar.
Peleamos con todo, Azuky no tenía piedad ni yo tampoco. -vamos Rei, ¿es todo lo que tienes?- se burlo. Lance mi cuchilla rosando sus blancos cabellos. Su cabello por fin había dejado de ser rosa, nuestros cabellos ahora eran del mismo color que el pelo de nuestros gatos.
Ella rió y me lanzo una de las cuchillas, enterrandose en la pared.
La ataque con Jason, ella bloqueo el ataqué con craneo de plata (el quinque nuevo de Hanbee) ambos quinques chocaron, haciéndonos retroceder, ninguno reía, estábamos realmente concentrados. Corrimos a atacarnos de nuevo el uno al otro... Pero el sonido de varios aplausos nos hiceron voltear a la puerta.
Marude, Arima, Kuroiwa y Shinohara nos aplaudían. Tres de ellos estaban de pie, mientras que el otro aplaudía desde su silla de ruedas.
-definitivamente tienes a unos grandes rivales, ¿no lo crees Arima?- pregunto Koroiwa, el otro nos miro con una sonrisa.
-ya lo creo.- se acercó y nos saludo. Asiendome recordar aquella vez en que Amon me obligo a inclinarme. Sonreí maliciosamente, le haria lo mismo a Azuky, voltee a verla pero ella ya estaba inclinda saludado a Arima. ¡Demonios! Olvide que ella si tiene lo que Amon llamo "buenos modales".
-vaya, Juuzou, hasta tu hermana se ve menos femenina que tu.- dijo Marude para molestarme. Como buen investigador, no dije nada.
Pero una cuchilla paso muy cerca de él haciendolo retroceder.
-Juzō- dijo Shinohara.
-yo no hice nada.- conteste.
-fui yo- Azuky se acercó a mi por la espalda y me abrazo por los hombros como si de nuevo fuera un niño. -se que Juuzou le respeta, pero yo no permitiré que NADIE- recalcó. -se burle de él. Y mientras no sea una investigadora... Cuide lo que dice.- su voz sonaba tan enserio que hizo palidecer a Marude.
-yo... Er... No dije nada.- balbuceo haciendome sonreír.
Arima sonrio y de nuevo se acerco a nosotros. -vinimos por tu hermana, Juuzou. Le haremos algunos exámenes orales y escritos. Queremos ver que tanto sabe y cuanta información le hace falta.- asentí.
-de acuerdo. ¿Solo seran exámenes sobre ghouls?- pregunté.
-si, los exámenes medicos ya le fueron practicados desde que estaba en el hospital- me contesto Kuroiwa.
Asentí de nuevo. -bueno Azuky, creo que nos vemos en casa.
Me soltó por fin y camino hasta Shinohara saludándolo con una inclinación.
Se giró a vernos a mis subordinados y a mi, se despidió con la mano regalándonos una gran sonrisa...

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Hoooooooooola jaja hoy les traigo este nuevo capítulo espero que ya se hayan recuperado del anterior 😅

Diganme: que esperaban que pasara después del beso??

Gracias por leer y seguir esta novela, ustedes me alietan a seguir escribiendo. 💙

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