- capítulo 8 -

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-¿Puedo sentarme aquí?- me preguntó un chico al que no había visto nunca.

Ese día mis amigos habían salido a comer por ahí, aunque era miércoles, pero decían que no pasaba nada porque no había nada que hacer para el día siguiente, ya que hacía muy poco que había empezado el curso y todavía no nos habían puesto los exámenes.

Pero claro, yo tenía que terminar un trabajo, así que me senté sola en la mesa de siempre, y me dispuse a hacerlo mientras comía.

-Claro.- le dije al chico, indicándole con la mano que se sentase.

Que sí, que tenía que hacer el trabajo, pero también tenía que encontrar un acompañante para la fiesta, y qué mejor momento que este, cuando nadie de mi grupo me podía pillar.

Estuve hablando un rato con él, descubrí que se llamaba Manuel, era un poco raro, pero muy majo, y bastante guapo.

Le dije de quedar al día siguiente para comer al salir de clase y aceptó.

***

Los problemas llegaron cuando se tomó demasiado en serio mi invitación.

El jueves tuve que quedarme más rato del que quería con él, rato en el que estuvo lanzándome indirectas.

En realidad era tan directo que me daba hasta risa. Él seguramente se pensaba que era la típica risita nerviosa, pero no, realmente me estaba riendo en su cara todo el rato.

A ver, tampoco me reía tanto de él, me caía bien el chico.

De hecho fui a la fiesta con él.

Al llegar, María se me quedó mirando.

-¿Y ese vestido?- preguntó.

-Pues no sé, me apetecía.- respondí con nerviosismo, ni yo misma sabía por qué había elegido eso, pudiendo venir en pantalones y top, como María.

Pero tampoco era la que más destacaba, había gente que se había tomado muy enserio lo de ir cliché.

Busqué a Manuel con la mirada, había ido al baño antes de entrar, y me estaba poniendo nerviosa. Necesitaba presentarle a mis amigos para que no dijesen que me lo había inventado.

Me cansé de esperar, pensé que ya me buscaría él, al fin y al cabo, el que quiere tener algo conmigo es él, no yo. Aunque eso último quizá no lo sabía.

No tardé en llegar a donde estaba todo mi grupo.

La fiesta no era gran cosa, pero ellos siempre sabían cómo pasárselo bien.

Aunque me apostaba mi propio hermano mellizo a que no tardaban en liarla.

-¿Y Carlos?- me preguntó Alba, que iba del brazo de Natalia.

-¿Por qué iba a saberlo?

-¿No veníais juntos?

-Pues no, ya lo he dicho, yo vengo con el nuevo.- contesté.

-¿Qué nuevo? Pensaba que este año sólo había llegado Carlos.- dijo Damion.

-Pues no, hay otro.- respondí.

-Además, Carlos viene con la chica esa.- dijo Miki, tenso.

-¿En serio, con la pesada?- dijo Noelia, rodando los ojos.

No tenía ni idea de quién hablaban, pero no me importaba.

Me giré para buscar a... Bueno, no tenía muy claro si buscaba a Manuel o a Carlos, pero el caso es que buscaba a alguien.

Y entonces le vi.

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Muchísimas gracias por las 1K de lecturas, os amo jo 🤧❤️❤️❤️

este capítulo es un poco... mierda, pero bueno, los próximos me gustan mucho!



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