Lo Siento; julright

- capítulo 39 -

Tamborileaba con mis dedos en la mesa del comedor mientras tarareaba una canción, esperando.

Estaba nerviosa, quería que todo saliese bien.

María me mandó un mensaje diciéndome que estaba todo listo, por lo que subí las escaleras rápidamente, dirigiéndome a la habitación de Carlos.

Esperaba que nos diese tiempo...

Entré sin llamar, estaba sentado en la cama, todavía iba con ropa de calle, lo que nos daba cierta ventaja.

-Ven.- dije, tirando de su mano.

-¿Dónde me llevas a las...- miró la hora- doce menos cinco de la noche?

-Es una sorpresa.- dije.

Llegamos a la entrada y salimos, él no decía nada, sólo me observaba.

Miré la hora, quedaban dos minutos.

-¿Bueno, y ahora?- preguntó.

-Espera...

-A saber lo que tramas.- dijo, revolviéndome el pelo.

-Eh, para.- le reprendí, riendo.

Un minuto...

-¿Y cuándo me lo vas a decir?- preguntó, poniendo un puchero.

-Cuando sean las doce.- respondí.

-Jo...

Le abracé, él me lo devolvió, fue un abrazo cálido, que duró bastante.

Nos separamos, y justo entonces, mi móvil vibró, indicándome que era la hora.

Le enseñé la pantalla de bloqueo, dónde lo ponía claramente.

2 de Enero, 00:00.

-Felicidades.- dije, antes de darle un tierno beso.

-Gracias, te quiero.- dijo, mirándome con sus brillantes ojos, en los que yo me perdía fácilmente.

-Ahora confía en mí.- me puse detrás suyo y le tapé los ojos con mis manos, caminando mientras le guiaba.

Llamé al timbre y me abrió Miki, señalándome a Damion, que se encontraba dentro del salón, con una venda en los ojos.

Entramos, le hice una seña a Famous para que le quitase la venda a Damion, mientras yo me separaba de Carlos, susurrándole que podía abrir los ojos.

-¡Sorpresa!- gritamos al unísono, Carlos y Damion estaban ilusionados.

-¡Qué tenéis dieciocho ya cabrones!- exclamó María, dándoles un abrazo a cada uno.

Fuimos felicitándolos uno por uno, soplaron las velas, y después Marilia puso música.

Bailamos, bebimos y nos lo pasamos muy bien, como siempre que estábamos juntos y más aún cuando había tanto que celebrar.

Eran las cuatro de la mañana cuando nos fuimos a casa, nos habíamos despedido rápidamente, sin ni siquiera preguntarle a Joan si venía con nosotros, teníamos otros planes.

Cuando llegamos, cerré la puerta tras de mí, y apenas dos segundos después Carlos ya había impactado sus labios en los míos.

Le cogí por la nuca, acercándolo más a mí, él puso sus manos en mis caderas.

Chocamos contra la pared, y entonces yo decidí que era mejor subir arriba, por lo que le cogí de la mano y le arrastré por las escaleras.

Ya en su habitación me tumbó en la cama y se puso encima mío, apoyando las manos en el colchón.

Respirábamos entrecortadamente, con los labios muy pegados, rozándose, fui yo la que los unió de nuevo, metiendo mis manos por dentro de su camiseta, acariciando su abdomen.

Se la quité en un movimiento rápido, y entonces él comenzó a bajar besos por mi cuello.

No tardó en quitarme todas las prendas que llevaba de cintura para arriba, y fue él mismo también quien se quitó su propio pantalón, quedando en igualdad de condiciones.

Deslizó sus manos por mis piernas mientras me besaba, y después comenzó a bajar, dispuesto a quitarme mi última prenda.

Después de unos minutos volvió a la posición inicial.

Nos miramos a los ojos, él me apartó un mechón de pelo de la cara.

-Te quiero.- dijimos al unísono, sonriendo como unos bobos al darnos cuenta de ésto, para después unirnos como sólo nosotros sabíamos, creando una atmósfera de amor y pasión, dónde sólo se escuchaban gemidos y más "te quiero".

Porque era así, nos queríamos.

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Hola! Siento no haber subido capítulo estos últimos días, se le olvidó avisaros de que me iba de viaje con mi instituto y que no iba a poder.

Espero que os guste este capítulo, ya que me ha costado bastante escribirlo.

Y gracias por leer y por las 16K, hasta mañana.🧡

PD: hoy he conocido a Carlos y es un amor jo