Enséñame #D2

Capítulo 58

POV Nina
Dos de la madrugada y estoy junto a León y Sol en el Blake listos para robas unas grabaciones de las cámaras de seguridad.

León: tenemos mucho tiempo, ¿Cuándo sale el avión?

Nina: a las siete.

Sol: pues démonos prisa, hay que conseguir esas grabaciones.

Nina: ¿Y si los ven por las cámaras?

Sol: también robaré estás y hackearé todo para que dejen de funcionar, creerán que fue un error técnico.

León: esa es mi mejor amiga. Ahora vamos.

Entramos a la oficina de la directora. Sol fue al asiento a encender la computadora mientras nosotros estábamos detrás de ella observando lo que hacía.

Sol: esto será mi venganza contra Ana.

Nina: ¿Ya nos podés decir? Sólo me dijiste que íbamos a entrar aquí pero…

Sol: enfrente del armario de limpieza hay una cámara. Ese armario de limpieza es donde Fran descubrió a Ana y Marco.

León: ¿Vas a publicarlo? ¿Qué pasará con Fran?

Sol: Fran no tiene porqué pagar, le enviaré las cosas a su mamá.

Nina: ¿Qué?

Sol: como oyeron – miré a León y ambos sonreímos. Sol es genial.

Tardamos 20 minutos en hacer todo. Salimos del Blake y los tres paseabamos por las calles de Buenos Aires.

León: fue estupendo. Nunca había sentido tanta adrenalina.

Nina: lo que hicimos fue allanamiento de morada. ¡Un delito!

Sol: somos niños, no nos harán nada – rió –. Tomen – sacó dinero.

León: ¿Qué es esto?

Nina: ¿Otra vez…?

Sol: necesitaba obtener su paga de algún modo – se encogió de hombros –. Ahora váyanse a su casa, tienen un avión que tomar.

Los tres nos despedimos y cada uno se fue a su casa.

Seis de la mañana. Apago el despertador, me siento en la orilla de la cama y bostezo. Muero de sueño. Tengo media hora para prepararme. Entro al baño, hago todo lo necesario y salgo, me pongo ropa cómoda y bajo llevándome una sorpresa.

Ana (Mamá): llegó hace cinco minutos. Dice que es tu novio.

Nina: si, eh… luego te explico mamá.

Ricardo: que bien porque yo también quiero una explicación – ¿Que no se supone que nos veríamos en el aeropuerto?

Nina: creí que te vería hasta el aeropuerto.

Ricardo: decidí venir antes.

Nina: hablaré con Gastón, esperen aquí – llevé a Gastón al patio –. Hola.

Gastón: hola – me abrazó –, no podía dejar que te fueras con León sin despedirme.

Nina: tranquilo, sólo seré su traductora. Fue una gran coincidencia que le hayan tocado las pruebas en Brasil.

Gastón: si, estoy tranquilo con eso – comenzó a poner más fuerza en mi muñeca –. Te extrañaré.

Nina: si, eh… – intenté soltarme un poco pero entre más intentaba más me apretaba – yo también.

Ana (Mamá): ¡Nina! – en ese momento me soltó – ¡Ya llegó el taxi!

Gastón: adiós hermosa.