Capítulo 12

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Me duché tan rápido como pude, tenía miedo de que en cualquier momento apareciera Hero en el baño, se podía decir que era mi paranoia, pero él siempre superaba mis expectativas. ¿Me siguió en la noche? Vamos, eso no se puede superar ¡BAM! Entra en mi casa sin permiso como un asesino. Cuando pasé por el pasillo hacia mi habitación miré en todas direcciones y salí corriendo.

Me vestí con unos jeans, una sudadera y até mi cabello en modo de coleta. Cuando bajé estaba sentado en el sofá con la vista fija en su teléfono, tuve que aclararme la garganta para captar su atención.

—Estoy lista—hablé caminando hacia la puerta, fue detrás de mí.

Subimos al auto y puso en motor en marcha.

—¿A dónde quieres ir?—preguntó con la vista fija al frente.

—No lo sé, fuiste tú quien me invitó.

—McDonald's será.

No respondí, en vez de eso me quedé en silencio mirando por la ventana en todo el trayecto. Cuando llegamos aparcó y bajamos, había pocas personas por la hora, unas dos o tres familias cenando y un gordo con barba devorando unas papas en la mesa del fondo. Fui a sentarme mientras Hero ordenaba la comida.

Al cabo de unos minutos estaba acercándose con dos bandejas, puso la mía frente a mi y la suya frente a esta y se sentó.

—Te compré una malteada de chocolate—dijo como si tratara de alegrarme, no funcionó—Yo...uh, quería disculparme—se mordió el labio nervioso ¿Hero nervioso? Era algo digno de ver.

—¿Por qué?—pregunté tomando un sorbo de la malteada, estaba deliciosa.

—Por lo de anoche...

—Explícate.

—Demonios Mía, sabes a lo que me refiero—se pasó la mano por el cabello y bufó.

—Hey, estaba ebria ¿Sí? Hagamos como que eso nunca pasó ¿Vale?

—Vale...¿Dejarás de gritarme como loca?

—Solo si dejas de comportarte como un psicópata—ambos reímos y supe que mi molestia ya era cosa del pasado. Continuamos comiendo y mientras tanto analicé el hecho de ver a Hero riendo, verlo así había pasado de ser un mito a una realidad muy constante, me preguntaba que había cambiado en él.

—Ten—habló Hero buscando algo en su chaqueta, sacó mi teléfono y me lo dio, lo había olvidado por completo.

—Gracias, lo había olvidado—cuando lo encendí noté que tenía varias llamadas perdidas de Luke y un montón de mensajes.

—¿Todo bien?—preguntó estudiándome.

—Si—decidí que no dejaría que Luke arruinara mi buen humor y guardé el dichoso aparato en el bolsillo de mi sudadera.

—Entonces ¿Qué dices si...

—¡Hola!—No. Era. Cierto. ¿Qué hacía ella ahí?

—Hola Lily—saludé entre dientes, Hero se tensó.

—¿Puedo sentarme con ustedes? No quiero comer sola—preguntó con ojos de cachorro, miré a Hero en busca de una respuesta y este negó ligeramente.

—Claro—respondí ignorando el pie de Hero golpeándome bajo la mesa, no podíamos ser tan maleducados. Me recorrí para que se sentara, sería el colmo que lo hiciera al lado de Hero.

—Son unas linduras—se sentó y tomó un sorbo de su bebida—Cuéntenme chicos ¿Por qué se fueron tan temprano de la fiesta?

—Mía estaba un poco pasada de tragos—respondió Hero mientras yo me comía una papa frita.

THROUGH ME (Herophine)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora