THROUGH ME (Herophine)

Capítulo 23

La mañana siguiente me desperté con un beso de Hero, a pesar de estar dormida al sentir el toque de sus labios mi cuerpo reaccionó. Cuando abrí los ojos me encontré con esa mirada verdosa que tanto me gustaba, su cabello estaba revuelto y su cara me daba indicios de que llevaba rato despierto.

—Buenos días—dije sonriendo.

—Más que buenos—me dio un beso en la comisura de los labios—Logan me envió un mensaje, dice que nos vamos después de desayunar.

—Iré a cambiarme—le revolví el cabello y salí de la cama.

—Mi camiseta te va bastante bien.

—Lo sé.

Entré al baño y me enjuagué la boca con pasta dental y agua, apenas llegara a casa me iba a lavar los dientes. Me di una rápida ducha y me puse los shorts, la camiseta me la iba a quedar. Peiné mi cabello y salí lista del baño, Hero ya estaba vestido, llevaba otra camiseta del mismo color, al parecer tenía mucha ropa negra, nada que no me sorprendiera.

—Qué guapa—me rodeó la cintura y me besó—Vayamos al restaurante tu hermana está muy impaciente.

Asentí tomamos todas nuestras cosas antes de salir de la habitación. En el restaurante estaban todos, sentados en la misma mesa que la noche anterior. Saludé a cada uno con un beso en la mejilla y me senté al lado de Hero, había mucha comida, waffles, huevos revueltos, tocino, tostadas y café, aparte de la miel y todo eso de acompañamiento. Me serví un plato con huevos y tocino, y dos waffles con crema batida y mermelada.

—¿Puedes creer que no tengan nutella?—preguntó Kath llevándose un bocado a la boca mientras yo picaba el mío.

—Que sorpresa—dije con sarcasmo, era obvio que no iban a tener nutella.

—¿Y cómo pasaron la noche?—preguntó Logan alzando las cejas de modo sugerente, recordé lo que pasó y sentí mis mejillas calientes.

—Bastante bien—respondió Hero—Dormí como un bebé.

—¿Ah sí?—preguntó Kath con el mismo tono que Logan ¿¡No podían cambiar de tema!??

—Incluso me chupé el dedo, como cuando era niño.

Todos rieron por su comentario menos yo. A mí me entró un ataque de tos increíble y me atraganté con un trozo de waffle, tuve que tomar medio vaso de jugo antes de calmarme, le lancé una mirada asesina a lo que él me guiño un ojo.

—Pues nosotros vimos una película bastante buena—dijo Kath cambiando de tema ¡Gracias! Tarde, pero gracias.

—¿Cómo se llamaba?—preguntó Hero—¿El entierro de la anaconda?

—¡Hero!—exclamamos mi hermana yo al unísono, todos los hombres presentes en la mesa se partieron de risa y Ryan escupió su jugo.

—Vamos niñas, no es para tanto—habló Logan haciendo un ademan con la mano mientras reía—Esa fue buena Hero— chocaron los cinco.

Al parecer mi vecino estaba muy bromista esa mañana pero sus bromas eran de muy mal gusto, al menos para mí ya que el esto parecía adorarlas. Terminamos de desayunar, con más comentarios impertinentes de Hero, risas y mis ataques de tos.

Logan pagó todo y se despidió de la recepcionista, ella le pidió el numero pero este hizo como que no escuchó nada, estaba segura de que habían dormido juntos. La grúa ya había llegado y subimos a la camioneta, Logan fue adelante a pesar de que no iba a conducir pero dijo que le daba poder.

Miré mi teléfono, eran las nueve treinta, estaríamos llegando a casa alrededor de las dos, para enfrentarnos a un castigo y regaño enormes. Aún tenía sueño, por lo que me recosté en el hombro de Hero y dormí todo el camino.