THROUGH ME (Herophine)

Capítulo 22

Entre Hero, Ryan y Logan llevaron la camioneta hasta un pequeño motel a unos cuantos metros, la dejaron en frente y entramos a recepción. En lugar no estaba tan mal, las paredes estaban pintadas de azul celeste y tenían pinturas marinas y figuritas de yeso con forma de caracolas y tortugas.

Logan se acercó a la recepcionista, una chica no mayor de veinticinco con cabello negro azabache y unos enormes ojos cafés. Cuando lo vio, se enderezó y sacó el pecho, me recordó a una paloma.

—Buenas noches—dijo mi tío inclinándose hacia ella—Queremos tres habitaciones.

—Yo puedo pagar la mía con Kath—habló Ryan y Logan negó.

—Están metidos en este lío por mí, déjenme encargarme de todo—mi cuñado asintió y abrazó a Kath.

La chica tecleó algo en su computadora y le tendió tres llaves mientras agitaba las pestañas. Estaba más que claro que le había gustado mi tío.

—Gracias, preciosa—dijo este coqueto, las mejillas de la chica se tornaron rosas.

—Tenemos restaurante—dijo la mujer señalando una puerta a su izquierda—La comida es buena.

—Lo tendré en cuenta—no sé si le guiñó un ojo o algo, pero ella le sonrió. Se dirigió a nosotros—Como saben, Kath y su novio compartirán la habitación...—miró el primer llavero—Ocho.

—Necesito una ducha—dijo Kath tomando la llave—Nos vemos en un rato en el restaurante, muero de hambre.

—Como quieras, nena—respondió Logan y mi hermana se fue con su novio.

—Ustedes, par de raros...compartirán la habitación—miró el otro llavero—Quince. Y yo bueno, estaré en la cuatro por si me necesitan. Pero primero iré por un trago.

Y sin más se fue al restaurante. Fui detrás de Hero hasta nuestra habitación, nuestra, esa palabra me resultaba incomoda. No podía compartir habitación con él. Abrió la puerta y me dejó entrar. Inspeccioné el lugar, una cama matrimonial con sábanas blancas y azules estaba en medio, al lado una mesita de noche con una lampara. También había un televisor y un ventilador en el techo, y una puerta que supuse era el baño. Al pie de la cama había una especie de baúl que de seguro era para guardar la ropa y luego dos pequeños sofás, en eso consistía la habitación y la verdad era que para mi estaba bien.

Fui hasta el baúl y dejé mi mochila sobre este, me senté en la cama y miré las pinturas. Había una que captó mi atención, era una de esas botellas en las que mandaban mensajes, pero dentro de ella no había un trozo de papel si no una persona, estaba en posición fetal siendo llevaba por las olas, tal vez escapando de todo en aquel barco de vidrio.

—¿Vas a ducharte?—preguntó Hero.

—Si quieres ir tu primero—me encogí de hombros, me sentía un poco cansada de la nada.

—Ve tú.

—Creo que mejor después de cenar...—me pasó por la mente que no había traído ropa, no era mi culpa, no tenia intenciones de pasar la noche fuera de mi casa.

—¿Quieres ir al restaurante?

Asentí y salimos de la habitación, la noche estaba fresca, pero seguía haciendo algo de calor. Cuando entramos al restaurante vimos a Logan solo en una mesa tomando una cerveza mientras miraba algo en su teléfono. Nos acercamos y nos sentamos.

—He pedido una pizza—dijo mirándonos.

—Una pizza está bien—dijo Hero, yo me limité a mirar por la ventana.

Minutos más tarde entraron Ryan y Kath y se sentaron con nosotros, no pude contenerme y me puse de pie.

—¿Kath podemos hablar?