Vuelve a mí (Terminada)

39

.

–   ¿Cómo te enteraste? – habló luego de quedarse callado por unos segundos.

–   Jennie los escucho, estaban en el pasillo hablando y así se enteró.

–   Yo...

–   Yo creí que de verdad solo era un juguete para ti. – El logró quedarse unos minutos en silencio, como tratando de pensar y procesar todo lo que me diría.

–   Chels, por favor, tú no eres un juguete para mí. – por inercia tomé su mano – Esto lo hice para protegerte, no iba a permitir que tu madre pagará con su empleo. Se lo mucho que lo necesitan y sé que Yannel y Talía cumplen lo que dicen.

–   Yo te necesito – miré a Randall a los ojos, el parecía algo frustrado, pero sabía que mi comentario le había gustado.

–   Y yo a ti – murmuró – debía comportarme así porque Yannel me vigila todos los días, desde aquella vez que me amenazo. Aquí siento que no es así...Chels...lo siento, soy la basura más grande del mundo.

–   Para actuar lo haces muy bien, realmente pensaba que me odiabas para decirme todas esas cosas.

–   Y me arrepiento demasiado, pero entiende que tenía que tratarte así.

–   ¿Tu aún sientes algo por mí? – pregunté con temor.

–   Claro que sigo teniendo sentimientos por ti Chels, eso no cambiará , pero ahora mismo no podemos estar juntos. – y era cierto, teníamos a unas locas llamadas Yannel y Talía.

–   Eso ya lo sé, pero no vamos a poder estar así todo el tiempo Randall.

–   ¿Y que tu madre pierda el trabajo y que no pueda estar en otro? – frunció el ceño.

–   Entonces olvídalo, tu y yo nunca vamos a poder estar juntos – solté su mano – lo mejor es estar así.

Tomé el bloqueador y me marche de su lado, agradecí que no me detuviera, es más, creo que ni reaccionaba. Lo que dije me dolió en el alma, pero a la vez sentía que Randall me ocultaba otra cosa ¿Esa es la única razón por la que él no quiere estar conmigo? Sé que el trabajo de mi madre es muy importante y aprecio que él se esté preocupando por ello, pero es inevitable ponerme a pensar que hay otra razón por la que Randall sigue obedeciendo a Talía.

En estos momentos no me sentía con ánimos de seguir en la playa. A veces sucede que cuando algo malo te pasa, sientes que odias todo. En esos instantes odiaba el sol, el calor, la arena entre mis pies, las risas de mis amigos, todo. Entre lo más rápido posible a la casa, me serví un poco de agua para refrescar mi garganta. Esperaba que nadie notará esa pequeña discusión que tuve con Randall.

–   ¿Te encuentras bien? – Allen llegó de inmediato conmigo.

–   Un poco, es difícil la situación.

–   No sé qué haya pasado entre ustedes, pero algo que te diré es que Randall no te quitaba los ojos de encima cuando estábamos en la playa. – reí – de verdad se nota que le gustas mucho.

–   Si lo noté y creo que si – me dio nostalgia recordarlo. – pero no puede haber nada entre nosotros.

–   ¿Todo está bien? ¿Qué hacen aquí? – entró Raquel.

–   Si, eso creo – dijo Allen – me iré para que platiquen – abandono la cocina. Raquel me lanzo una mirada intensa para que hablara.

–   No, todo está mal – expresé – no debí venir a esta fiesta – hice un puchero fingido y ella rio.

–   Es por el cumpleaños de Wendy.

–   Lo sé, solo bromeaba, pero ahora ni siquiera sé cómo me siento – suspiré – no, mentira, si se cómo me siento. Estoy enojada, triste y con unas inmensas ganas de matar a tu hermano. – ella rio – decidimos que no íbamos a estar juntos.

–   Lo sé, lo sé y respecto a mi hermano quiero proponerte algo – el tono de voz de Raquel cambio, al igual que su mirad.

–   Me estas asustando ¿Tu ya lo sabias?

–   Randall me lo acaba de confesar hacer unos instantes, lo noté muy mal cuando tu entraste a la casa y ahí lo interrogue.

–   Ya veo, me imagino que todos se dieron cuenta que discutíamos. – Raquel asintió.

- El punto es, mi madre está buscando una asistente de medio tiempo para su apoyo. Si tu mamá acepta el trabajo, Yannel no podrá hacer nada en su contra.

–   ¿Estás diciendo que mi madre entre por palancas* a un trabajo? – hice una mueca.

–   Si, algo así, sé que entre Randall y yo podemos convencerla – reí nerviosa – anda Chels, le pagaran mejor a tu mamá y tu estarás con Randall.

–   No lo sé, mi madre no sé si aceptaría, no le gusta entrar así de fácil.

–   Dile que vaya a una entrevista de trabajo a la dirección que te mandaré por mensaje – Raquel siempre tan preparada – Igual sé que mi madre la contrataría sin que nosotros le digamos.

–   Esta bien – sonreí – se lo comentare después.

–   Veras que todo saldrá bien, cuando esto pase créeme que Yannel y sobre todo Talía, me las pagaran.

–   No quiero enfrentamientos, por favor, seguirán en mi contra pase lo que pase. – proteste, deje el vaso en el fregadero.

–   Con venganza o sin venganza ellas no te dejaran de joder Chels.

–   ¡Chicas! – el gritó de Brent nos asustó – ¿Están listas para pasear por los alrededores? – note que atrás de él estaban Dallas y Randall.

–   ¿Alrededores? – pregunté con curiosidad.

–   Si, hay tiendas, discotecas, restaurantes, boutiques, entre otras cosas que les gustan a los turistas – contestó Randall mirándome fijamente.

–   Oh, suena interesante – añadí sin quitarle la mirada.

¿Por qué pasaba esto con Randall? Solo nos mirábamos como un par de tontos.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
___

Capítulo cortito :( pero espero que les guste.

Por palancas*: es cuando entras a un trabajo por la ayuda de algún familiar o conocido. Sin entrevista de trabajo etc.