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Soy una idiota. Por poco y le digo lo que siento por él ¿Qué hubiera pasado si se entera? Posiblemente se reirá de mi o lo más seguro es que me lance comentarios horribles. Pues el siempre me recordará a cada maldito segundo, minuto y hora, que jamás se fijaría en alguien como yo. Y eso nunca saldrá de mi mente.

Él no me escogería cuando tiene a miles de chicas tras de él.

–   ¿Me puedo sentar? – Raquel se encontraba justo a mi lado.

–   No tienes por qué preguntar – reí.

–   Lo siento.

–   ¿Cómo sabias que estaba aquí? – digamos que estaba alejada de todos los edificios.

–   Te seguí – sonrió – escuché tu pequeña pelea con mi hermano justo cuando iba al baño, perdón.

–   Ya veo, no me pidas perdón, yo soy la que te lo debe de pedir. – murmure apenada.

–   No claro que no y menos cuando le gustas a mi hermano.

–   Como crees – negué – yo no le gusto y no soy su tipo. – traté de ocultar mi tristeza, pero falle – Él siempre me lo dice.

–   Debes creerme – me sonrió – Randall jamás se había comportado así desde Talía.– sentí un escalofrío – Si te soy sincera, mi hermano ha hecho acciones por ti que no creo que las hubiera hecho con su ex novia o con ninguna otra. Como, por ejemplo, se metió a un gimnasio en llamas para salvarte, golpeo a Oliver cuando se enteró que te había puesto la mano encima y se muere de celosos cada vez que ve a Harold cerca de ti ¿Y sabes cómo nos damos cuenta? – negué con la cabeza – Porque no puede ocultar sus sentimientos y emociones, ya que jamás los había sentido.

–   Eso lo se – limpié las pocas lagrimas que se asomaban – pero me confunde, siento que le gusto, pero a la vez no ¿Entiendes?

–    Si lo entiendo – agarró mi mano – pero tú debes de entender a mi hermano. No le ha llamado la atención ninguna chica para tener algo serio.

–   Estuve a punto de confesarle mis sentimientos – murmuré apenada – pero no lo hice por miedo.

–   Todo a su tiempo Chels, estoy segura y convencida que mi hermano también te confesará sus sentimientos.

Estuve un rato más con Raquel, platicando de muchas cosas y me contó un poco más de sus hermanos. Dice que Raymond es el raro y que casi no se lleva bien con los amigos de Randall, ni siquiera con Wendy o Tracy, por eso mismo no lo vemos mucho. Es una pena, cuando lo conocí se me hizo un chico interesante y sigo reafirmando esa postura. La campana sonó y yo tenía clase de Artes. Me despedí de mi amiga y fui directo al salón. Hoy lo que haríamos es una pintura a Óleo y eso me encantaba, no lo hacía a menudo, pero me relajaba bastante.

–   Estuviste muy desaparecida este día.– hablé llegando a su lado.

–   Lo sé, pero aproveché el tiempo con mi novio. – me sonrió. Esta clase la comparto con Wendy y Tracy.

–   Creí que ibas a decir estudiando.

–   Si, ya quisieras – reí.

Vuelve a mí (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora