¿Cómo reaccionarías si los chicos te dieran una "nalgada" accidental?
Maknae Line.
JIMIN:
Tener a JiMin en un estado somnoliento, hambriento y cansado era suicidio.
Mochi estaba enojado. No había desayunado, a penas había dormido una hora y tuvo que saltarse el almuerzo por la práctica. Estuvieron practicando por al menos cinco horas y había un tráfico insoportable.
No era su mejor día, por ello los demás decidieron dejarlo contigo, él te adoraba aún en sus peores días, además no ibas a permitir que lo dejaran solo. Pero ahora, no parecía una buena idea que Park conviviera con otro ser vivo.
Bajaron del auto y notaste que los ojos de JiMin apenas se mantenían abiertos. Con rapidez, corriste hacia él, sin embargo, fue demasiado tarde. Se había desmayado y... Bueno, en el proceso su mano había "rozado" tu retaguardia.
Con el rostro ruborizado, lo arrastraste con cuidado hasta su habitación, donde, con una sonrisa, JiMin "despertó" y se tiró a la cama contigo abrazada.
—Sólo quiero dormir junto a ti.
Ambos se durmieron recordando el suceso.
TAEHYUNG (V):
No sabían cómo habían llegado a eso, pero no importaba, se estaban divirtiendo.
El juego consistía en vendar los ojos de un miembro y dejar que este encontrara a otro jugador y así sucesivamente.
Tae tenía la venda puesta y llevaba algunos minutos detrás de JungKook. Estabas tan concentrada en Shippearlos que no notaste cuando Kim volteó hacia ti.
Era demasiado tarde, estaba a punto de alcanzarte y, entonces, un sonido seco resonó por toda la sala.
—¡TaeHyung! ¡No puedes aprovecharte!— gritó Jeon indignado y en cierto punto, celoso.
Sin entender qué había sucedido, se quitó la venda y entendió lo que había pasado.
—Yo... Realmente no me arrepiento de nada.— dijo encogiendose de hombros y dándote una mirada que sólo ustedes dos entendían.
JUNGKOOK:
—¡No te muevas!— gritaste con una chancla en tu mano.
Había un gran insecto de intruso en su habitación. Hoseok había desaparecido misteriosamente cuando lo vio, dejándote a ti sola con esta mutación horripilante. No sabías quién estaba más asustado, tu o esa cosa.
Rezando para dar en el blanco, lanzaste tu arma contra el insecto. Desafortunadamente, la criatura no identificada esquivó el zapato, revelando que, en realidad, poseía también un par de alas.
Comenzó a volar y tus gritos no se hicieron esperar.
JungKook fue a tu habitación y fue tarde cuando vio por qué griatabas.
—¡Cuidado! ¡Va hacia...!
Jeon se resbaló y sus manos terminaron en un lugar... Un lugar que no era desconocido para JungKook.
El bicho salió del lugar.
—¿Sabes qué animal era?— preguntó con una sonrisa pícara.— Porque se ha convertido en mi insecto favorito.
Y eso fue todo. He estado concentrada en mi otra historia, que creo abandonaré debido al poco interés que han manifestado al respecto de mis opiniones.
Bien, nos leemos pronto.
Bai.
