20 |Hermano|

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Agosto del 201*

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Agosto del 201*

Luego de las debidas presentaciones y de que Sophie terminara de babear por mi hermano, porque la pelinegra terminó siendo también una gran admiradora de él —razón por la cual se llevaría de maravilla con Keira—, ella tuvo que irse a dejar unos informes al trabajo.

—Me ha caído bien tu amiga —expresa Charles cuando estamos solos.

— ¿Por aumentar tu ego?

—Porque ella sabe apreciar la belleza, sorellina. —Se sienta en el filo de mi cama y yo lo hago en la silla de mi escritorio quedando frente a él.

— ¿Dónde te estás quedando? —interrogo— ¿En un hotel o en uno de los departamentos?

—En el departamento de Mayfair —responde—, junto con los chicos y Enzo, ya sabes que no nos gusta quedarnos en un hotel.

—Solo no vayan a destrozarlo —pido, sabiendo que al estar Frank y Simón con mi hermano las fiestas nunca podían faltar. Solo falta Adam y la orgía se armaría.

No por nada esos cuatros son conocidos como "Los dioses de la diversión". Fama que se han ganado desde que estaban en la secundaria y por la cual mamá ha tenido grandes dolores de cabeza.

Por suerte los castigos tampoco nunca faltan.

—No prometo nada. Pero ahora lo que necesito es una buena rebanada de pizza, la comida que brindan en el avión es cada vez peor —se queja.

—Por primera vez estoy de acuerdo contigo, fratello —manifiesto—. Te acompaño, aunque la verdad es que yo no tengo hambre.

Antes de salir peino lo más que puedo mi cabello y tomo únicamente mi celular. Espero que para cuando llegue Sophie ya esté aquí.

Bajamos hasta el parqueadero y es ahí en donde me doy cuenta de la gran idiotez que ha hecho mi tonto hermano.

Ahora sí que mi padre lo matará.

— ¡Papá te va a asesinar! —menciono, al ver el gran Maserati Grancabrio color rojo, el auto favorito de nuestro padre y que solo él puede usar.

—No es para tanto, sorellina —dice muy tranquilo, sacando el seguro de auto—. Además... el viejo no tiene por qué enterarse, ¿no crees?

Él en serio no valora su vida.

—Que papá no te escuche llamarle viejo, porque no solo serás un feo cadáver, sino también, uno sin apellido —le advierto antes de subirme en auto.

Cuando Charles se ubica tras el volante no puedo evitar añadir:

>>Papá se entera de todo, lo sabes mejor que nadie.

Mi tonto hermano solo se limita a alzar sus hombros restándole importancia al asunto, se coloca sus gafas de sol y pone en marcha el bebé de papá.

Ya quiero ver si hace lo mismo cuando nuestro padre se entere, estoy segura que no saldrá de pie de eso.

LLEGADA DE AMOR |LIBRO 1: CLAN BERTINELLI|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora