I: El dia de la profecía

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La pequeña de ojos azules se encontraba ahora observando, fascinada, un espectáculo de fortaleza pura. Una mujer, una midgardiana, de rubios cabellos, luchaba con espadas frente a frente a un hombre, incluso, era mejor que el, pues cada ataque que el guerrero le enviaba ella lo esquivaba con rapidez, y sin esfuerzo lograba atinarle un contraataque en donde menos se lo esperara su contrincante. No pasó mucho hasta que la pelea termino, con el hombre tendido en el suelo, derrotado.

Todos los presentes comenzaron a reír y a aplaudir, fascinados por el espectáculo que acababan de presenciar, la pequeña Faye sin duda aplaudía con mucho entusiasmo, le fascinaba que una mujer pudiera pelear a la par de un hombre, se pregunto que grandes hazañas podría vivir ella si tan solo supiera defenderse y atacar como la guerrera lo hacia. Sus palmas chocaban entre si, eufóricas, tanto así que cuando bajo de su éxtasis mental observo que la guerrera la observaba divertida, sonriendole, antes de caminar hacia la pequeña Jotnar que se encontraba parada sobre una mesa.

_ ¿Quieres intentar, pequeña? _ Le preguntó la mujer, tendiéndole a la niña una pequeña espada desafilada, la niña miró incrédula a la mujer _ Vamos, se que quieres... eres una mujer libre ¿No?

La niña tomo el mango de la espada, era pesada, pero no tanto como que se cayera de sus manos . ''Puedo con esto'', se dijo la pequeña mientras bajaba de la mesa, y caminaba junto a la guerrera al espacio del mercado que se encontraba despejado de gente. Allí la guerrera se puso en posición de pelea, la niña la imito lo mejor que pudo. La mujer asintió, indicándole a la niña que atacara, comenzando así un divertido entrenamiento.

Luego de un rato, y de muchas risas de parte de ambas féminas y los espectadores, bajaron sus espadas. La mujer camino hasta una pequeña playa de madera donde había gente sentada en mesas y sillas, tomo dos vasos metálicos de unas mesas, uno lo lleno de cerveza y el otro de agua. La niña por su parte se sentó en el borde del Playón, exhausta, tratando de recuperar la respiración, su vestido amarillo se había ensuciado un poco, así que comenzó a tratar de sacarle la mugre con las manos, pronto vio un vaso de agua ser asomado por sobre su hombro, al mirar sobre el se encontró cara a cara con la escudera.

_ Gracias _ dijo la niña tomando el vaso con sus pequeñas a manos _ ¿Tu eres una Skjaldmö?

_ Así es _contesto la mujer _ Y tu una Jotun _ La pequeña la observo asombrada, no muchos midgardianos notaban su verdadera naturaleza antes de que ella misma se lo dijera, pues era una Jotun del mismo tamaño que el promedio de los midgardianos _ Tienes un aire diferente, ademas, hay alguien que no te a quitado la vista desde la lejanía en todo este tiempo _ Dijo la mujer juguetona, observando a alguien que se encontraba no muy lejos, Faye siguió a donde su mirada, encontrándose al final con los divertidos ojos de su hermano mayor, quien a pesar de solo ser un niño, apenas mayor que ella cargaba consigo dos metros de altura _ Es muy joven, para ser tan alto ¿No?

La niña rió, en su hermano era claro su linaje, a diferencia de ella. Su hermano camino hasta las mujeres e hizo una reverencia con la cabeza a la mujer.

_ Disculpe, pero debo llevarme a mi hermana _ La mujer asiente y el muchacho se dirige a su hermana _ Madre y padre ya guardaron la tienda Faye, debemos volver con ellos antes de que terminen de empacar.

Egil tendió su mano hacia Faye y ella la acepto, dejando su baso y espada a una lado, elevándose mientras observaba a la mujer.

_ Le agradezco el entrenamiento... amm...

_ Brunilda, ese es mi nombre _ Respondió la midgardiana a la silenciosa pregunta de la niña.

_ Faye.

La mujer rubia sonrió _ Tienes mucho talento, dulce Faye, yo no podría levantar una espada tan pesada a tu edad _ La niña ladeo la cabeza ''¿espada pesada?'', no entendía cual, la espada que ella había usado no le pareció tan pesada al tacto _ Si algún día se te ocurre querer ser una Skjaldmö, yo me ofrezco para ser tu maestra.

Nórdico | God Of WarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora