Capítulo dieciocho.

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SIDNEY RODRIGUEZ

—¡¿No me piensas ayudar?! —me gritó Elena.

Y reaccioné.

Corrí hacia donde estaba ella y la ayude a levantar a Farias. Él era casi del mismo tamaño que Theo pero el peso no era igual; pero aun así lo podíamos soportar.

Aseguré su brazo en mi hombro y empezamos a caminar.

—¿Se desmayó? —le pregunté.

Yo creo que sí...

—No lo sé, tal vez si. Ahora lo que tenemos que hacer es llevarlo al departamento.

—¿Cómo que tal vez sí? —volví a preguntar.

—Es que me dijo Víctor que estaba bebiendo mucho, capaz... coño deja de hacer preguntas y camina más rápido que él pesa

Asentí y seguimos caminando hasta que vi a ¿Hulk?

—¿Hulk? —pregunté viendo que se acercaba.

—Lo que faltaba —musilló Ele.

—Elena, ¿qué haces aquí? —preguntó Hulk.

Al detallarlo mejor noté que era Gabo, y en ese momento tenia tantas ganas de abrazarlo y decirle tantas cosas pero no podía.

¿Razón? Nelson Farias a mi lado, desmayado.

Me fije en su disfraz y luego el de Nelson. Hulk y Spider-Man.

Oh señor, me siento protegida.

—Ayuda a—

—¿Un ángel? —preguntó Gabo viéndome.

Sonreí pero después recordé que tenia un cubre boca color blanco y la sonrisa desapareció.

—¿Eso realmente importa Espinoza? —le preguntó Elena.

¿Es idea mía o Elena está tratando muy mal a Gabo?

—No, no. ¿Te ayudo? —me preguntó.

Asentí y le cedí el puesto a Gabo pero sin soltar a Nelson.

Cuando noté que estaba seguro quite mi brazo y los dos empezaron a caminar rápido hacia la entrada del edificio. Yo los seguí y junto a mi había un chico blanco de ojos verdes con traje de Capitán América.

¿Cómo llegó o cuando llego él? Ni idea pero en serio, me siento protegida.

Entramos al edificio y fuimos directo al ascensor.

—Hey sid, tus alas no van a caber —dijo Elena —, sube en el otro ascensor.

Asentí y apreté el botón del otro.

—El piso es el número cinco, puerta veinte —esta vez fue Gabo entrando al ascensor junto a Elena y Capitán America.

Cuando la puerta del ascensor se abrió vi a Nerea Laborde mirando el suelo.

—¿Nerea? —pregunté. Quería verificar si en realidad era ella.

Aunque sabia que era ella por el disfraz, pero de igual forma quería verificar.

Carta » Nelson FariasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora