Nunca pensé que llegaría a enamorarme del hombre mas orgulloso y engreído que he conocido. Mucho menos que yo estaba relacionada con un mundo que creí inexistente.
Gracias a mis poderes prácticamente pude desaparecer, me dirigí sigilosa hacia la habitación de John. Cómo conocía bien la habitación de él me puede teletransportar hacia su clóset, una ves hay me quedé quieta y puedo escuchar una conversación que tenía con alguien por teléfono, escuché que le decía a la persona del otro lado del teléfono, que él tenía que actuar rápido porque ya no soportaba más estar en este lugar, decía que no podía seguir fingiendo y que, si más personas sabían de mi poder, menos probabilidades tenían de cumplir su cometido.
Se escucha un gran silencio, luego él respondió.
-No te preocupes, esta misma noche la voy morder y extraer una buena cantidad de sangre.
-El poder de su sangre es increíble, solamente bebí de ella una sola vez y puedo decirte que mis poderes han aumentado un 80%, además, descubrí que tengo otros dones gracias a su sangre. -hizo una pausa escuchando lo que le decía al del otro lado de la linea y luego volvió a responder.
-No te preocupes hoy al atardecer nos reuniremos donde siempre.
Jhon colgó la llamada y yo me teletransporte a la habitación de Máximo.
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-Pequeña porque no tocas antes de entrar. -refuta Máximo.
Lo siento es que... yo...
No pude más y solté todas las lágrimas que tenía acumuladas, el hechicero se levanta de la cama, se puso un pantalón de chándal, camino hacia mí y me estrecho en sus brazos.
-¿Ya pequeña, que fue lo que te paso para ponerte así?, cuéntame qué es lo que pasa? -Máximo estaba preocupado y no es para menos yo estaba llorando de forma descontrolada. No podía controlarme, solamente lloraba y lloraba como si fuera una Magdalena y el hechicero no tiene mucha paciencia que digamos.
-Pequeña perdóname por lo que voy a hacer, pero te voy a hechizar para que puedas hablar.
Ni siquiera le respondí, creo que esa sería la única manera en la que pudieras decirle lo que había escuchado. Escuché cuando Máximo recitaba algunas palabras y de repente dejé de llorar, me limpié las lágrimas, me senté en la cama de Máximo, el me miraba expectante de lo que le pudiera contar, el dejo que me tomara mi tiempo para empezar y luego, comencé a hablar.
Máximo, hace un rato me teletransporté al clóset de la habitación de Jhon, cuando lo hice, escuché que él estaba hablando por teléfono, me quedé muy quieta para escuchar que decía, él hablaba con alguien, le decía que desde que me mordió sus poderes habían aumentado y otros dones se habían sumado, decía que me mordería otra vez y absorbería tanta sangre de mi como pudiera, también dijo que no aguantaba más estar aquí, que no podría durar un día más. -hago una pausa, miro a Máximo quien se mantiene prestándome toda su atención, y continúo hablando.
Máximo no sé qué pensar, ¿porque Jhon me está haciendo esto?, ¿acaso no soy su alma?, porque está de aliado con otra persona?, ¿por qué?, dime máximo, ¿por qué?
