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Casandra y Máximo no se han ido de la habitación desde que caí en la inconsciencia, sé muy bien que ellos nunca me dejarían sola en este momento. Hace más de una hora que estoy despierta, no puedo creer que esté embarazada y mucho menos puedo creer que vaya a tener un hijo del hombre que me traicionó y me engañó sólo para obtener mi sangre, ni siquiera se para quién trabaja, porqué es obvio que trabajaba para alguien más. Todos creen que voy atentar contra mi vida o contra la vida de este bebé, y eso es algo que nunca haré. Esta noticia me ha caído de golpe, me siento herida y destrozada, pero este bebé no tiene la culpa de nada, por eso me voy a levantar y voy a luchar, le voy a demostrar a todos que puedo con esto y más.

Yo saldré adelante con este bebé y con todas las personas que me aman y me apoyan, no voy a defraudarlos.

Abrí los ojos y me senté en la cama, Casandra al verme corrió hacia mí, se sentó en el borde de la cama y tomó mi mano.

-¿Nena, dime cómo te sientes?

Me siento bien, Casandra, no te preocupes más de la cuenta.

Vi como máximo dirigía su atención hacia mí, se notaba la tristeza en su rostro, sé que él está triste por lo que me está pasando.

¿De verdad estás bien? -pregunta el hechicero

Claro que sí máximo estoy perfecta, pueden estar tranquilos, yo no voy a atentar contra mi vida o la de este bebé, recuerden que soy fuerte, además los tengo a ustedes dos, a Ramsés, a Moisés y a mis hermanos, no estoy sola, este bebé nacerá y será amado por mí y por ustedes. -ellos me miraban con asombro, sé que no esperaban a una Dania positiva.

-La verdad es que nos alegra mucho ver que estás tomando esta noticia con madurez. No imaginas lo angustiados que estábamos porque no sabíamos cómo reaccionarías cuando despertarás. -comenta Casandra.

Puedes decirle a los demás que estén tranquilos, yo estoy bien.

De eso me encargo yo. -máximo salió de la habitación en busca de los demás.

¿Qué has sabido de John?, pudieron sacarle algún tipo de información? -le pregunte a Casandra.

-Aún no me informan nada, me dijeron que cuando le sacaran información se comunicarían conmigo, pero aún no ha recibido ninguna llamada. -respondió.

¿Te gustaría tomar o comer algo? -por Dios!!!!!, esa pregunta vale oro.

La verdad sí, tengo ánimos de comer un trozo de pastel de chocolate, también quiero comer espaguetis y quiero una batida de guineo con fresas.

Wauuu!!!

Eso sí es tener apetito. - dice mi hermano entrando a la habitación.

Que puedo decir, ahora como por dos. - dije con una sonrisa en mi rostro. Todos en la habitación me miraban con tristeza, pero yo les haría cambiar de parecer, no me gustaba para nada que me vieran así, derrotada.

¿Dónde están los demás?

Los chicos salieron y Rubí viene en un rato. -respondió mi hermano.

¿Dónde está ella?

Está tomando un baño. -respondió Eliseo, cosa que no le creí por su tono de voz.

Quiero hablar con todos después de comer. -dije.

-En un rato traerán lo que pediste, mientras tanto date un baño, todos te esperaremos en la sala para que nos digas lo que nos quieres decir. -dijo Casandra antes de que salieran de la habitación dándome espacio, cosa que agradecí infinitamente.

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