14. Viéndote de nuevo
Como todos los horribles veranos de su vida, Harry lo pasó en casa de los Dursley. Con su obeso primo a dieta y sus tíos tan insoportables como de costumbre. Pero, gracias a la intrusión de Sirius en su existencia, ésta había mejorado mucho. Vernon, le dejaba tener su baúl en la habitación, por miedo a las represalias de su padrino peligroso, y Hedwig podía salir libremente de su jaula sin impedimentos. Mantenía el contacto con Black, mediante pergaminos que le escribía éste, que a veces eran de su puño y letra, y otras, de la mano de Remus, su admirado profesor, que por lo que veía el ojiverde, no había faltado en su palabra de que se encargaría de su padrino. Además, cumplió catorce años, y recibió pasteles de sus amigos, Ron, Hermione, Hagrid y del mismo Sirius.
Esas vacaciones, Harry había tenido una pesadilla con Voldemort, que le provocó un inmenso dolor en la cicatriz al despertar, por lo que no le quedó otra más que escribirle a su tutor extraoficial para informarle. Pero, los acontecimientos que siguieron, le hicieron olvidar ese mal sueño. Recibió una carta de los Weasley invitándole a los Mundiales de quidditch, cosa que le entusiasmó, y éstos personalmente le buscaron en la casa de Privet Drive.
Esto benefició que Harry también se distrajese de lo referente a Draco Malfoy. Durante las vacaciones, se había sorprendido a sí mismo escribiendo su nombre en los bordes de los pergaminos inconscientemente, mientras hacía los deberes y había tenido que rehacerlos varias veces, para su disgusto. Tampoco podía dejar de pensar en él antes de dormir, al despertarse, al desayunar, almorzando, a la hora de la cena, en la ducha...aunque ahí no le importaba mucho. Mirase donde mirase, hiciera lo que hiciera, ahí estaba Draco, sus ojos grises, su nívea piel, sus hermosos cabellos, su magnética sonrisa.... Repasaba mentalmente todos los momentos que había compartido con el rubio, y le inundaban unas inmensas ganas de besar aquellos labios que le fascinaban, sumados al gran arrepentimiento de no haberlo hecho cuando tuvo la ocasión. Quizás esperar a la próxima Navidad, era aguantar demasiado.
Cuando Harry puso un pie en La Madriguera, conoció a Bill y Charlie, los hermanos mayores de Ron. Los gemelos, al parecer, se habían pasado el verano creando artilugios de broma y Percy trabajaba en el Ministerio de Magia, en el Departamento de Cooperación Mágica Internacional, bajo las órdenes de Barty Crouch. Y Hermione, como no, también estaba allí, como una más de la familia.
Para desplazarse a los Mundiales, cogieron un traslador, que resultó ser una bota vieja, y en el acto estuvieron en un páramo cercano al estadio. Una vez allí, se instalaron en dos tiendas de campaña, donde dormirían esa noche, y que estaba rodeada por otras cientos de ellas, acogiendo a magos de todo el mundo.
Llegó la hora del ansiado partido, que enfrentaba al equipo de Irlanda contra Bulgaria. Ellos eran partidarios de Irlanda, pero el buscador de Bulgaria, Viktor Krum, les entusiasmaba. Y los asientos ni se diga, en una tribuna con una panorámica espectacular y junto al ministro, Cornelius Fudge.
Una vez que el trío se hubo sentado en las butacas de color rojo y dorado, vieron aparecer a Lucius Malfoy, seguido de la mujer que Harry había visto en la estación abrazando a su rubio, que supuso entonces, era la señora Malfoy, y tras ella, mirando al estadio, Draco, que como atuendo muggle había elegido un elegante traje negro, y llevaba en la solapa de la chaqueta, una insignia de un trébol, que se iba haciendo cada vez más grande hasta que reventaba en miles de tréboles más pequeños.
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Te odio...amor (Harco-Slash)
FanfictionTodo empezó en la tienda de túnicas de Madame Malkin, Harry y Draco se vieron y...se odiaron ¿verdad? Harry x Draco (algo de Ron x Hermione & Sirius x Remus). OoC. Mpreg opcional. Por si este resumen no lo deja demasiado claro, es un fic CHICO X CHI...