La Legión del Caos (Temporada 2) [Eldarya]

Capítulo 35: Palabras inesperadas.

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"No es bueno que todo suceda como deseamos. Cuando todo nos sonríe en el mundo, nos apegamos a éste muy fácilmente y el encanto es muy fuerte. Por eso, y porque Dios nos ama, no permite que durmamos mucho y muy cómodamente en este lugar de destierro".

Jacques Benigne Bossuet

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Sede de la Orden de Sion – Sala Magna de Reuniones (01 de abril, 09:00 a.m.):

Aunque había sucedido un momento en que la asistencia había disminuido considerablemente, frente a sus prácticas que muchas veces rayaban en lo macabro para gran parte de los novatos, en pocos días Fleur Dumont se había hecho con una popularidad que, si bien a ella dejaba indiferente, había sorprendido a los más veteranos, llegando incluso, hasta ese día, a llenar las bancas del lugar hasta con aquellos que supuestamente no necesitaban de aquellos reforzamientos.

Para Leon, Ophelia, Travis y Paula, en lo personal, habían terminado esperando aquellas jornadas con ansiedad, para aquellos que debían protegerlos, se habían sentido curiosos de ver que, tras creer que esos niños colapsarían, se habían mostrado mucho más fuertes de lo que habían creído, se habían pasado el fin de semana creyendo que debían cuidarlos como frágiles pequeños, cuando ellos mismos les habían demostrado, al inicio de la nueva semana, que estaban mucho más enteros de lo que se esperaban, sobre todo Ophelia que, ante la posibilidad de pedir vacaciones y así mantenerse alejada de ese asunto, había contestado con una sonrisa: No hay forma que me pierda las conferencias de la señorita Dumont. Tras haber analizado la situación, Jessica había comentado que, de alguna manera, aquella Rosen Creutz le estaba ayudando a esa musa a superar el trauma acontecido por Bae Dak-ho, y aunque esa muchacha aún temblaba cuando hablan del Artista, ya no colapsaba... y eso, había dejado tranquilo de sobremanera a Mikael y Vincent, por otro lado, dado el refuerzo de las unidades y el movimiento de las Brigadas de Investigación, junto al Departamento de Respuesta Inmediata, siguiendo la alerta máxima respecto al fugitivo Bae, había hecho que aquellas reuniones se hicieran en diferentes horarios, ese día en especial, había sido organizada en la mañana.

—Bien —dijo Fleur apagando el proyector y caminando hasta el centro de la tarima—. Con esto será el fin de la conferencia del día de hoy.

—¡Profesora!

Ella se detuvo junto al escritorio en donde estaba sus pertenencias, alzando la mirada, vio a una novata de las Brigadas de Control vial alzar una mano, entonces, dejando de regreso sus carpetas, Fleur se centró en esa muchacha que, tomando aliento, se daba ánimos para continuar con su intervención.

—Sobre ese sospechoso que no ha sido capturado aún... es Bae Dak-ho, ¿no? La información de él también fue dada a los medios humanos, ¿no es así?

—Según un amigo —añadió el chico a su lado—, una de las últimas víctimas era compañera de trabajo de su hermana mayor en el Saint George.

Los asistentes comenzaron a murmurar, Fleur alzó la mirada hacia aquellos asientos superiores donde estaban esos cuatro niños junto al nephilim que siempre estaba con ellos, Leon Blackfield le miraba con aquellos ojos verdes brillantes, llenos de admiración, que desde un tiempo hasta ahora dedicaba a ella... Haciendo que, como ahora, se obligara desviar la mirada al sentirse avergonzada, además aquello parecía haberse extendido en cierto grado a sus hermanos postizos, ya que desde que había hablado con Ophelia Fatine respecto a Bae Dak-ho, los otros dos muchachos, Paula Almeira y Travis Fatine, habían dejado de observarla con miedo... Y lo cierto es que no entendía por qué esos chicos le miraban así, no recordaba haber hecho nada especial para que se comportaran de esa manera, así que, carraspeando, se obligó a recuperar su postura estoica y mirar a aquellos asistentes con profesionalismo.