Un corazón sin heridas del pasado

Jiraiya II

Jiraiya Sama, yo se que lo que hizo mi maestra no está bien, y no quiero justificarla, la infidelidad es de canallas, solo se, que ella está arrepentida, se que usted no lo ve así porque es el directamente afectado, pero estoy segura que ella lo ama a usted, dice Shizune con mucha sinceridad en sus palabras; Shizune, yo no la odio, pero detesto al sujeto o sujetos que me la han robado, ella es mía, pero parece que nunca podré ser del todo feliz, siempre pierdo algo valioso, y me duele, no es justo, pero siento que no debo quedarme, lo mejor que puedo hacer es solicitar otra misión, y decirle a mi hija si quiere acompañarme, no quiero permanecer mucho en la aldea, ya he sufrido por amor por bastantes años, y no quiero seguir sufriendo por eso, dice Jiraiya con un rostro resignado.

Jiraiya se levanta de la silla, y camina con su libro de notas y pincel en sus manos, hacia su casa, despidiéndose de Shizune, ella le da fuerzas para no rendirse, y se dirige a buscar a su esposo Kakashi.

Al llegar a casa, ve a Tsunade sentada en la silla del comedor leyendo un libro, el no hace ruido, y sube por las escaleras, entra a su habitación, se recuesta en la cama, y comienza a nadar en sus pensamientos, ahora se siente más solo que nunca.

Jiraiya escucha que la puerta de su casa se abre, es su hija, quien llega de la academia, saluda a su madre, y sube a su habitación, Jiraiya espera que su hija se instale en su cuarto, entra y se sienta a su lado.

Hola papá, como estás, dice Raynade

No bien, realmente no estoy bien, escuché lo que tu madre y tu hablaban anoche, me levanté para ir a buscar a tu madre, y la escuché hablando contigo, no pude evitar escuchar, tu madre me fue infiel, todo este día he estado triste y muy nostálgico, pero talvez lo merezco, y entiendo que no me lo hayas dicho en primera instancia, le tiene mucho respeto a tu madre, y mucho cariño, y no le harías daño, pero...es que...; Jiraiya no continúa con sus palabras; papá, te voy a ser sincera, mi madre Tsunade me dijo que no te lo dijera, no fui capaz de decírtelo, yo amo a mi mamá, y te amo a ti, pero en este caso estoy contigo, y se como te sientes, porque se que eres de un gran corazón, y se que eres honrado, y que no le haz fallado a mamá, se de tu pasado, pero eso no me importa, porque se que tu eres un buen hombre, y se que no le haz sido infiel a mamá, perdóname sino te dije la verdad, pero tuve miedo de lo que ella pensara de mi; dice Raynade.

No te preocupes hija, yo te entiendo, y te quiero mucho, eres mi orgullo, gracias por creer en mi, dice Jiraiya, ambos se abrazan y lloran; pequeña, debo decirte algo, me voy a ir de la casa, y quisiera saber, si me acompañarás para la próxima misión, ya tiene ocho años, lo suficiente para ir a una misión; dice Jiraiya, ella asiente felizmente y abraza nuevamente a su padre, oye papá, pero yo quiero ser tu escolta, seguro que seré la mejor; dice Raynade, claro que si, yo también lo creo, estás hecha para hacer grandes cosas, para ser grande, lo sé, lo veo en ti, dice Jiraiya.

Ambos se ponen a jugar con los peluches de Raynade, hasta que la niña queda dormida abrazada a su padre, quién también queda dormido; lo que no saben es que Tsunade se quedó a oír toda la conversación, y se derrumba en llanto, resignada a perderlo todo; se va a su habitación, se recuesta sobre su cama, pone sus manos en el espacio de la cama que es para Jiraiya, se pone atacada a llorar, llamando con una voz triste y gastada, a quien ama con toda el alma y a quien a perdido, a su amado Jiraiya, "Te Amo Jiraiya" es lo que dice Tsunade quedando poco a poco dormida, y con lagrimas en sus ojos